Comenzaron los cruces entre Sanz y Macri por los límites de la alianza
En el encuentro entre ambas fuerzas (el primero tras la Convención de la UCR que hace cuatro días selló la alianza electoral) no hubo demasiados avances en cuanto a cuestiones instrumentales de funcionamiento, ni se habló del armado de listas conjuntas, pero sirvió para intentar acercar posiciones luego del cruce mediático protagonizado por Mauricio Macri y Ernesto Sanz.
Durante la reunión -en la que se evaluó como «positivo» el impacto de la flamante alianza en el electorado-, los operadores radicales Federico Storani, Walter Ceballos y Facundo Suárez Lastra, escucharon las explicaciones de la contraparte macrista, Emilio Monzó, Humberto Schiavoni y Diego Santilli sobre los dichos de Macri, quien el martes pasado contradijo a Sanz y aseguró que no habrá gobierno de coalición junto al radicalismo y la CC-ARI.
«En octubre se competirá y se verá. Si la gente lo elige… el que gana va a conducir el gobierno nacional y pedirá o no colaboración. Esos son los términos en lo cual lo hemos planteado», afirmó el actual jefe de Gobierno porteño.
Frente a sus socios electorales, los macristas argumentaron que las palabras de Macri tuvieron «una errónea interpretación semántica», aunque aclararon que el objetivo fue «replicar la ofensiva guionada desde el oficialismo que intentó vincular este espacio a la Alianza», en alusión a la coalición que levó a la presidencia a Fernando de la Rúa, quien debió abandonar el gobierno en el 2001, en medio de la peor crisis de la historia del país.
Para los radicales, el tema «está cerrado», dijo a Télam Storani, y si bien reconoció que, gane quien gane, entre Elisa Carrió (CC-ARI), Sanz y Macri, se mantendrá la «cultura presidencialista» insistió en que, en caso de imponerse en octubre se conformará un «un gobierno de coalición».
Sin embargo, uno de los representantes de la otra parte en la reunión, ratificó en dialogo con Télam los dichos de Macri y sostuvo que para el PRO «no va a haber cogobierno».
Del encuentro no participaron representantes de la CC-ARI, que lidera Elisa Carrió, quien ayer fustigó duramente a sus flamantes socios, particularmente al ex presidente de Boca por la ampulosa cena de recaudación de fondos que el PRO realizó en el predio de la Sociedad Rural de Palermo y en la que se recaudó 130 millones de pesos, entre los más granado del empresariado.
«A diferencia de Macri y del radicalismo, yo no me financio con grandes empresarios», disparó ayer la diputada nacional, quien además se definió como «un peligro para el establishment, porque no hago negocios, no me financia nadie».
Según pudo saber esta agencia, Carrió tomó la decisión de no enviar representantes a la mesa de negociación con las fuerzas socias.
«Sus interlocutores van a ser Sanz o Macri, no quiere negociaciones ni a través de los medios, ni a través de operadores», dijeron tajantes fuentes de la CC-ARI.
La propia diputada nacional señaló que su fuerza no participará de un armado de listas conjuntas (a legisladores nacionales) con el macrismo y la UCR, algo que buscaban las otras dos fuerzas.
«Vamos a una interna legitima, pero no vamos a participar de listas conjuntas, porque vamos a mantener nuestra ética en términos de fondos de campaña», aseveró.