«Nosotras decidimos cortar la Ruta 7 hasta que el gobierno nos dé algún tipo de respuesta»

Por Maximiliano Borches

La delegada de la fábrica Textil Neuquén Patagonia, Marina Catilao, conversó con IB24, sobre el sorpresivo vaciamiento, cierre y despido de las que son víctimas las trabajadoras de esa planta textil. Este nuevo cierre de una fuente de trabajo, se suma a otros varios cientos que atraviesan la geografía nacional como producto de la crisis que atraviesa la Argentina desde que asumió el gobierno de Mauricio Macri, y como resultado,además, de la apertura indiscriminada de importaciones que puntualmente afecta al sector textil. Lo peor que podría hacer nuestra sociedad es naturalizar esta situación que destroza la vida de miles y miles de familias argentinas, cuya organización primaria se da en base al derecho al trabajo para proporcionarse una vida digna.

¿Cuál es la situación en la Textil Neuquén Patagonia?

Nosotras el martes recibimos un mensaje en el que nos decían que de la fábrica estaban saliendo camiones con mercadería en horas de la noche, así que nos vinimos con un par de compañeras donde constatamos que habían vaciado la fábrica.

-¿Esto sucedió el martes pasado?

Sí, este último martes.

 -¿Qué cantidad de trabajadores había en la fábrica?

Acá había más de cien trabajadoras, de las cuales en los últimos tiempos sólo quedamos treinta y cinco.

-¿La mayoría son operarias mujeres?

Sí, el noventa por ciento somos trabajadoras mujeres, de familia, con hijos, que durante doce años hemos dejado nuestros riñones en las máquinas a éstos empresarios quienes se han llenado los bolsillos, ¿no?, y hoy aluden una crisis y vacían la fábrica, cierran la fábrica, se llevan las máquinas entre gallos y medianoche como totales delincuentes  y vacían la fábrica y nos dejan en la calle.

Marina Catilao: «Nosotras, después de haber ido a la Fiscalía a hacer la denuncia correspondiente tomamos la fábrica y estamos con nuestras familias, con nuestros hijos adentro de la fábrica y vamos a seguir apostadas en la fábrica hasta que el gobierno nos dé algún tipo de respuesta, porque nosotras lo que queremos es seguir trabajando»

-¿Ustedes habían sido notificadas que iban a ser despedidas o se encontraron con la fábrica cerrada?

Nosotras, el 16 de enero habíamos entrado de vacaciones y teníamos que reincorporarnos a nuestros puestos de trabajo el lunes 6 de febrero, y nosotras no sabíamos que los empresarios iban a hacer esto, sí habíamos denunciado en el mes de noviembre que éstos empresarios, Diego y Hernán Huerta, dueños también de las famosas Tiendas Amichi y de las Tiendas Royal, nos amenazaban con despedirnos, y cuando nos dirigimos a la Subsecretaría de Trabajo ellos decían que no era así, que eran sólo comentarios, que eso no iba a suceder, por eso nos fuimos de vacaciones pensando que el próximo lunes íbamos a volver a nuestros puestos de trabajo. 

-¿Qué medidas están tomando ante esta situación?

Nosotras desde ayer al mediodía, después de haber ido a la Fiscalía a hacer la denuncia correspondiente, tomamos la fábrica, estamos con nuestras familias, con nuestros hijos adentro de la fábrica, y vamos a seguir apostadas en la fábrica hasta que el gobierno nos dé algún tipo de respuesta porque nosotras lo que queremos es seguir trabajando, seguir produciendo, porque es la manera que llevamos el plato de comida a nuestros hijos. Hoy en el transcurso de la mañana, después de una asamblea, las compañeras decidimos cortar la Ruta 7 kilómetro 3 a la altura de la fábrica, esta ruta comunica Neuqúen con la Bicentenario y vamos a estar acá en la ruta hasta tanto el Gobierno nos dé algún tipo de respuesta.

-¿Están recibiendo algún tipo de intimidación policial en el corte que llevan adelante en la ruta?

No por ahora, la policía durante todo este tiempo lo único que ha hecho ha sido defender a éstos empresarios, ese mismo día cuando ellos estaban vaciando la fábrica lo único que hicieron fue impedir que nosotras, las trabajadoras, ingresáramos a la fábrica, mientras éstos empresarios se escapaban por la puerta de atrás cubiertos por la policía.