El ex interventor de Lotería de la provincia de Buenos Aires, Franco La Porta, manifestó su malestar ante la decisión de la Gobernadora María Eugenia Vidal de cerrar los Centros de Ludopatía que hoy funcionan en la provincia de Buenos Aires y dependen del Instituto de Lotería.
De esta manera, el ex funcionario explicó: «El Programa de Prevención y Atención al Juego Compulsivo lo creamos durante mi gestión al frente del Instituto, porque consideramos que como Estado debíamos administrar y regular la recaudación que proviene del juego, pero no podíamos hacer oídos sordos a los efectos negativos que esta actividad ocasiona y en donde también es necesario intervenir».
En el año 2005, el Instituto de Lotería firmó un convenio con el Ministerio de Salud para crear el Programa de Prevención y Atención al Juego Compulsivo, pionero en Sudamérica, donde trabajan equipos terapéuticos interdisciplinarios, registro de autoexcluidos, reglamentación acerca de la publicidad del juego; y a partir del cual se crearon en ese momento los Centros de Ludopatía. Según denuncian empleados, las autoridades expresaron la intención de cerrar los 10 Centros que hoy están funcionando, y que atienden a 1500 pacientes.
Vidal está mal asesorada si insiste con mirar para otro lado ante esta problemática. El juego compulsivo es una enfermedad, es muy triste ver a familias que se derrumban por este tema y cerrar los Centros donde al menos hoy pueden atenderse estas personas es tener muy poca sensibilidad social
La Porta expresó: «Vidal está mal asesorada si insiste con mirar para otro lado ante esta problemática. El juego compulsivo es una enfermedad, es muy triste ver a familias que se derrumban por este tema y cerrar los Centros donde al menos hoy pueden atenderse estas personas es tener muy poca sensibilidad social».
Por último, el ex interventor concluyó: «Cuando me tocó estar al frente de Lotería hicimos todo lo posible para regular el juego, incluso enviamos la Ley contra el Juego Clandestino, hicimos la primera campaña de concientización sobre juego compulsivo e intentamos que el Estado intervenga en todos los aspectos del juego».
