
Mauricio Macri se opuso a la reforma laboral impulsada por el kirchnerismo
El jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, fue el primer líder opositor y precandidato presidencial en salir a cuestionar el proyecto de reforma laboral que impulsa el kirchnerismo, al considerar que no permitirá crear nuevas fuentes de trabajo y promoverá el trabajo informal «con condiciones leoninas en contra de los trabajadores».
Mauricio Macri salió a manifestar su rechazo a una eventual reforma de las leyes laborales que aumente el monto de la indemnización mínima y amplíe el plazo de licencia por paternidad. El jefe de Gobierno porteño y candidato a presidente consideró que una medida en ese sentido «va a generar más trabajo en negro» y deseó que «no prospere».
Además, el líder del PRO remarcó que «no hay apuro» para definir quién lo acompañará en la fórmula presidencial, aunque sí reconoció que «ganó consenso» en la interna PRO presentarse a las PASO con una «fórmula propia» compuesta por dos integrantes del partido amarillo.
Macri consideró que el gobierno «de forma prepotente ha ido imponiendo reformas que la mayoría de los argentinos no estamos de acuerdo» en referencia a la información publicada en el matutino La Nación que anunciaba probables cambios en las leyes laborales. Para Macri, «eso ha generado leyes con las que creemos que no se genera más trabajo. Esperemos que esta ley no prospere porque va a generar más trabajo en negro».
«No sentimos que se vaya a generar más empleo y más trabajo. Esperemos que esta reforma laboral en algunos aspectos no prospere. Argentina tiene el 18 por ciento de los empleados en blanco: menos de la mitad de lo que tiene Chile, menos de un tercio de lo que tiene Australia», prosiguió.
Insistió con que el proyecto, si es aprobado por el Congreso, abrirá la puerta a «condiciones precarias de trabajo para la gente. Todo lo contrario de lo que uno quiere: que la gente se pueda jubilar, que tenga obra social».