Macri ordena, Bertone obedece
A escasos ocho meses de lo que se supone será el final de su mandato al frente de la gobernación, Bertone ostenta una variedad de récords que difícilmente puedan ser igualados por sus sucesores: todos los números son negativos si evaluamos los referidos a la calidad de vida de los fueguinos.
Escribe Ignacio Campos
Ser pobre en la isla implica una situación mucho más angustiante que la de pobladores de otros puntos de nuestro extenso país, ya que la inclemencia climática coloca a estos pobres muchas veces al borde de la supervivencia. Y desde la llegada de Bertone y Macri, las cifras se han duplicado y prometen seguir aumentando, por imperio de las políticas de ajuste que instrumenta la gobernadora, en acuerdo con la administración nacional de la derecha obediente a los designios del FMI.
Las cifras oficiales dan cuenta del tremendo deterioro en las condiciones de vida de los sectores más vulnerables de la isla: sólo en los últimos seis meses, la pobreza pasó de un preocupante 10.4%, al crítico 17.9% actual, lo que implica un aumento de 7 puntos porcentuales.
La situación del sector industrial explica en parte los motivos del fuerte retroceso social, ya que desde finales de 2015 se han perdido más de 10.000 puestos de trabajo, impactando en el resto de los sectores que vieron cómo, paulatinamente, fueron desapareciendo los clientes de las tiendas, supermercados, farmacias y finalmente estos argentinos, desplazados salvajemente a la pobreza, se ven impedidos de pagar las abultadas tarifas de servicios esenciales que sufrieron incrementos superiores al 600%, acompañados de un virtual congelamiento de salarios de los empleados públicos, cuya dotación es muy numerosa comparada con otras provincias argentinas.
Casi como un reflejo del camino recorrido por Macri, Bertone intenta su reelección imposibilitada de mostrar un solo signo positivo en su gestión, sea cual fuera el ítem que tomemos para analizar. Muy por el contrario, ha degradado cada uno de ellos, incluida la entrega escandalosa de las banderas soberanas de Malvinas. Entonces nos preguntamos: ¿Qué ofrece en adelante Bertone?
La gobernadora no ha sabido sostener las posturas ideológicas que le debieran ser propias a alguien que asumiera el poder merced a los votos del campo nacional y popular. De modo que solo podemos esperar más ajuste, endeudamiento y pobreza, en momentos en que el país en general y los fueguinos en particular necesitan de quién cuide de ellos y por sobre todo les asegure trabajar por un futuro más digno y promisorio. Por lo mostrado hasta aquí, Bertone no es garantía de ninguno de estos anhelos.