
La mitad de la cosecha de granos está retenida por los productores
Durante una recorrida aérea por los partidos bonaerenses de Pergamino, Arrecifes y Rojas, la agencia Télam pudo comprobar cómo se esconden los granos de soja y maíz detrás de los montes y muy lejos de los caminos.
Si bien al costado de algunos caminos de tierra, e incluso de rutas provinciales, se puede apreciar la presencia de algunos silobolsas, el grueso de las hileras plásticas que guardan la cosecha sólo puede divisarse desde el aire, puesto que están secretamente ubicadas detrás de arboledas y montes, fuera de la vista general.
El martes, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner afirmó en Casa de Gobierno que «hay una maniobra de pinzas sobre la Argentina hecha por los sectores exportadores, que están sentados como ellos mismos han reconocido sobre 27 millones de toneladas (de granos), prácticamente la mitad de la cosecha».
«Han perdido dinero a lo pavote, se los dije cuando inauguramos la fábrica Yamaha; ahí estaba todavía a 470 dólares la tonelada, se los había dicho cuando llegó a estar a 560», dijo la jefa de Estado, quien agregó: «Creían que era todo un artilugio para que ingresaran los dólares».
Hace algunos días, el titular de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi, había reconocido en una entrevista radial que los productores «perdieron dinero» y hasta que se equivocaron «en haber retenido los granos y no haber vendido hace cuatro meses atrás».
El dirigente de la Mesa de Enlace admitió que la conducta especulativa de los productores era «natural», y señaló que tomaron esa postura porque «no le creen» al ministro de Economía, Axel Kicillof. (Telam)
Pero nada más apropiado que las cifras duras, de fuentes públicas y privadas, para graficar las existencias «guardadas» en silobolsas. Concretamente, los productores locales de soja mantienen retenida prácticamente la mitad de la producción de la campaña 2013/14 –cuyo volumen alcanzó el récord de 55 millones de toneladas –ya sea para el destino de exportación o para la molienda del grano por parte de la industria (en muchos casos se trata de los mismos actores), según coinciden fuentes públicas y privadas.
El remanente sin vender representa ingresos de divisas por cerca de 10 mil millones de dólares. El volumen en dólares es tan importante que, para compararlo, equivale a un tercio de las reservas actuales que tiene el Banco Central (BCRA). De acuerdo a los analistas, la especulación en torno a una posible devaluación que compense la tendencia bajista que atraviesa la oleaginosa –y que no parecería revertirse en el corto plazo– es la principal causante.
Datos del Ministerio de Agricultura al 27 de agosto pasado –los últimos disponibles– informan que la venta de soja supera las 31 millones de toneladas (9,2 millones para la exportación y 21,8 millones para la industria, en este caso el último dato es al 20/08) sobre una cosecha total estimada en 55 millones de toneladas, pero que trepa a 57 o 58 millones de toneladas si se le agrega el remanente del ciclo anterior. ¿Qué sucedía para la misma fecha del año pasado? A la misma semana del año 2013 se llevaban vendidas 31,658 millones de toneladas, es decir, un volumen similar al operado durante este año, pero con un detalle no menor: el volumen producido supera en más de un 11% a la campaña 2012/13.
La comparación semanal entre una campaña y otra da cuenta del «goteo» en que los productores están comercializando la soja 2013/14: entre el 20 y 27 de agosto pasado –siempre en base a datos oficiales– las ventas para embarque sumaron tan sólo 156 mil toneladas, lo que equivale al 0,28% de la cosecha, mientras que la misma semana, pero del año pasado, las ventas al sector exportador sumaban 257 mil toneladas, el 0,52% del total de esa cosecha.
También en base a datos del Ministerio de Agricultura, la firma Kimei Cereales S.A., especializada en la comercialización de granos, señaló que el margen de la cosecha de soja que aún permanece sin vender equivale al 48,99% sobre una producción total estimada en 55 millones de toneladas.
Daniel Vilariño