CUATRO DE CADA DIEZ JOVENES PARTICIPAN DE APUESTAS ONLINE
La diputada nacional Constanza Alonso llevó adelante la realización del informe “Apostar no es un juego”, que reveló que 4 de cada 10 jóvenes en Argentina han participado en apuestas online y advierte sobre sus graves consecuencias.
Alonso dirigió estratégicamente el relevamiento del estudio y está trabajando en un proyecto de ley para regular y prohibir las apuestas online, poniendo el foco en una problemática creciente: las apuestas online y su alarmante impacto en adolescentes y jóvenes.
«Es una problemática que no podemos ignorar y debe ser regulada», expresó. Y señaló que «el desafío es múltiple: debemos generar conciencia, establecer una regulación adecuada y brindar apoyo a quienes ya están atrapados en esta dinámica».
“El proyecto, que desarrollamos junto a mis compañeros de bloque, tiene como eje central la prohibición de toda publicidad que fomente las apuestas online. Como dirigentes, es nuestra responsabilidad ofrecer soluciones que protejan a la juventud argentina, quienes están cada vez más expuestos a los peligros de la ludopatía”, añadió. Además, señaló que “la falta de regulación en este ámbito está generando consecuencias alarmantes, que no solo impactan en jóvenes y adolescentes, sino también en sus familias y comunidades”.
En tanto, subrayó que “prohibir la publicidad y controlar el acceso a las apuestas es esencial para frenar esta pandemia silenciosa. No podemos permitir que el juego esté a solo un clic de distancia, sin filtros ni restricciones”.
El equipo que acompañó a la diputada en esta iniciativa está conformado por el Licenciado Martín Romeo, Profesor de Técnicas de Investigación en Opinión Pública de la Facultad de Ciencias Sociales UBA; y el Licenciado en Trabajo Social y concejal de Unión por la Patria en el municipio de Chivilcoy; Fernando Cabani.
«Apostar no es un juego»
El informe, surgido del relevamiento realizado en 360 localidades de las 24 provincias argentinas, contó con la participación de más de nueve mil jóvenes de entre 15 y 29 años.
Con la colaboración de universidades, ONGs y gestiones municipales, Alonso destacó que los resultados del estudio evidencian una situación preocupante: “4 de cada 10 jóvenes han apostado recientemente en plataformas online”.
Algunos de los datos más alarmantes del informe incluyen que casi la totalidad de los adolescentes y jóvenes conocen las apuestas online. La mayoría dedica hasta 2 horas diarias a esta actividad, y un 30% ha experimentado ansiedad o estrés al no poder apostar. Aunque el 60% de los apostadores cree que ganar depende del azar, un 20% piensa que sus conocimientos deportivos influyen en los resultados, lo que los especialistas llaman «ilusión de control». En promedio, los jóvenes destinan a las apuestas el equivalente a dos tercios del dinero que reciben de sus padres, aunque los montos varían según factores como la edad, el género, el nivel educativo y la ocupación.
Además, el 75% de los jóvenes tiene amigos o allegados que también apuestan, lo que genera un entorno de riesgo tanto para quienes aún no han comenzado como para aquellos que desean dejar el hábito.
Origen del proyecto
La preocupación sobre esta problemática surgió en Chivilcoy, ciudad natal de Alonso, cuando docentes locales advirtieron sobre el creciente número de estudiantes involucrados en apuestas online.
«Las apuestas ya no son solo una actividad de entretenimiento; estamos hablando de un comportamiento que podría volverse adictivo para muchos», resaltó la diputada.
El estudio también señaló la falta de regulación como un factor clave en la expansión descontrolada de las apuestas online. Alonso recalcó que, aunque en Argentina existen sitios de apuestas legales con ciertos controles, muchos jóvenes acceden a plataformas ilegales sin restricciones.
«Debemos avanzar hacia una regulación que esté a la altura del desafío. Es inaceptable que menores de 18 años puedan apostar sin ningún tipo de control, como sucede en los sitios ilegales que operan desde el extranjero», enfatizó.
El informe también destacó el impacto económico que las apuestas están teniendo en la vida de los jóvenes. Dos de cada tres pesos que reciben para gastos cotidianos terminan en apuestas, lo que genera una preocupación adicional en los hogares de menores ingresos.
«Estamos ante un problema que atraviesa todos los estratos sociales y económicos, y que afecta directamente al bienestar de las familias», indicó.
La necesidad de una legislación firme
Uno de los objetivos del informe fue impulsar y aportar herramientas para el debate parlamentario con el fin de unificar propuestas que enfrenten esta problemática. Alonso también destacó la importancia de regular la publicidad de las apuestas online, señalando que muchas celebridades e influencers juveniles promueven estas plataformas sin considerar su impacto en los jóvenes.