
Por la baja tasa de natalidad, la sociedad de Japón podría “dejar de funcionar”
Fumio Kishida, primer ministro de Japón, advirtió que la baja tasa de natalidad y el envejecimiento de su población están poniendo en riesgo el funcionamiento como sociedad en el país asiático.
“Japón está al límite de poder seguir funcionando como sociedad”, manifestó Kishida a los legisladores en una declaración al inicio de la sesión parlamentaria. Al respecto, precisó que el número de nacimientos cayó por debajo de 800.000 el año pasado, según estimaciones.
En ese sentido, el jefe del Ejecutivo prometió “centrar la atención en políticas relativas a los niños y la infancia como un tema que no puede esperar y que no puede ser pospuesto”.
Estas políticas, que incluyen el lanzamiento en abril de una Agencia para la Infancia y la Familia, están orientadas a apoyar a los padres para asegurar la sustentabilidad de la tercera economía mundial.
A su vez, adelantó que el gobierno está trabajando en duplicar el gasto que dedica a programas relacionados con la infancia. “Debemos construir una economía social que dé prioridad a la infancia para revertir la baja tasa de natalidad”, sentenció.
Con 125 millones de habitantes, Japón es el segundo país del mundo con una mayor proporción de personas mayores de 65 años, después de Mónaco, según datos del Banco Mundial.