Guatemala: El Congreso le retiró inmunidad al presidente Pérez
El Congreso de Guatemala aprobó retirar la inmunidad al presidente Otto Pérez Molina para que sea juzgado por acusaciones de corrupción.
La decisión, para la cual hacían falta al menos 105 votos del pleno, fue aprobada por los 132 diputados presentes en la sesión, sin votos en contra, incluida la aprobación de legisladores oficialistas. Se ausentaron 26 legisladores.
Pérez fue acusado de encabezar una trama de corrupción por medio de la cual se permitía, a cambio de sobornos, la evasión de impuestos a las importaciones en la aduana. La ex vicepresidenta Roxana Baldetti está en prisión por este caso.
Ahora, el caso volverá a la Suprema Corte de Justicia, que lo remitirá a un juez, el cual podrá solicitar su detención. Pérez, que concluye su mandato de cuatro años en enero, había presentado esta semana un recurso de amparo ante la Corte de Constitucionalidad, que aún no ha sido resuelto.
En las afueras de la sede del Congreso, cientos de personas celebraron la medida y se escucharon juegos pirotécnicos.
Fueron los guatemaltecos los que permitieron la votación del retiro de la inmunidad y formaron una valla humana para que los diputados pudieran entrar al recinto legislativo debido a que algunas de las entradas habían sido bloqueadas por simpatizantes del mandatario.
«Fue algo impresionante que la misma población llegó e hizo una cadena humana y un corredor para que pudiéramos pasar, me impresionó que le dieron una rosa blanca, nos protegieron de las agresiones de los sindicalistas que fueron acarreados para que no pudiéramos pasar», dijo el diputado opositor Leonel Lira, que es uno de los 127 diputados que ingresó al edificio legislativo.
Una pequeña bandera de Guatemala en cada curul y carteles improvisados donde se leía #soyvoto105 se pudo observar dentro del hemiciclo.
Pérez Molina, un general retirado de 64 años que llegó a la Presidencia de Guatemala en enero del 2012, es el primer mandatario desaforado de la historia del país.
El antejuicio a Pérez Molina fue solicitado el pasado 21 de agosto por el Ministerio Público (MP) y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), que argumentaron que existen pruebas suficientes que involucran al mandatario en la red de corrupción.
El general retirado y Baldetti eran los jefes de un grupo criminal que cobraba sobornos por el paso de mercancías importadas sin pagar los impuestos correspondientes, según las indagatorias del Ministerio Público y la CICIG.
Pérez Molina ha negado todos los cargos y se resiste a renunciar pese a la presión de ciudadanos, empresarios, universidades, iglesias y organizaciones sociales. Su equipo legal presentó recursos de amparo en un último intento por frenar el proceso legal en su contra.
El saqueo de las arcas públicas por mafias arraigadas en las aduanas, el Banco Central, los partidos, la policía o el Seguro Social ha generado una oleada de indignación sin precedentes en la recta final hacia los comicios en el país centroamericano, donde se calcula que un 70% vive en la pobreza.