“La noción de distopía habla menos sobre el futuro de una sociedad que sobre los modos de producción económicos del presente” – Fredric Jameson.
TETR1S es una de esas obras que interpelan, que sacuden, que disparan la reflexión. La palabra, el cuerpo, la música y las luces se articulan en este unipersonal que aborda los debates contemporáneos sobre la virtualidad y sus territorios de conquista; la nostalgia, la soledad, la insatisfacción y la posibilidad de una fuga emancipatoria que nos pueda liberar (aunque sea un poco, aunque sea de a ratos).
Nuxx (interpretada por Sofía Siniscalco) es una joven gamer -aficionada al Tetris- que usa su tiempo para aprender programación de manera autodidacta. Busca hackear el sistema de contrataciones que la emplea y la burocracia estatal que promete beneficios inexistentes.
Corte, incertidumbre y soledad
Al entrar a la sala, lxs espectadorxs encuentran a Nuxx, sola en su cuarto, trabajando en un proyecto. Un corte de luz interrumpe su tarea y el personaje se enfrenta a la incertidumbre: ¿Es un corte provocado intencionalmente para evitar el hackeo o una simple falla energética? ¿Será que sus acciones son predecibles para los algoritmos?
Así comienzan las reflexiones sobre su situación, sus proyectos, su angustia, el sentido de su trabajo. “Nuxx explora la soledad en su dimensión positiva, como espacio necesario para la construcción de su subjetividad. Esta pieza teatral explora la posibilidad de una fuga emancipatoria que resquebraja, en conexión con otres, los muros que separan y distancian”, explican las autoras de TETR1S.
Resquebrajar los muros
“Partimos de la convicción de que es posible correrse de los discursos apocalípticos –tan presentes hoy, sobre todo a partir de la pandemia- que lapidan horizontes, haciéndonos cargo de la importancia de reconocernos sujetxs activxs de la construcción del presente y su devenir”.
“Nuestra obra hace especial énfasis en la voluntad y deseo de construcción de saberes, reivindicando el aprendizaje autodidacta y en redes de trabajo colaborativo como punto de fuga. Creemos necesaria una ciencia ficción que piense nuestros propios territorios, nuestras propias problemáticas”, añaden.
El juego, el azar, la inmediatez, la soledad, la amistad, la posición política, el robo a pequeña escala, la reivindicación del error que se opone a lo programado, se entrecruzan en TETR1S.
Diversidad de sentidos
Uno de los aspectos más interesantes de un hecho artístico es la diversidad de formas posibles de contar lo que se quiere contar y, a la vez, de probables interpretaciones con que cada espectador o espectadora puede aproximarse a la obra, de acuerdo a su edad, a su historia personal y a su pertenencia ideológica, cultural y de género.
En ese aspecto, TETR1S ofrece un amplio menú de sentidos posibles. Desde una mirada más vinculada a la experiencia de los “gamers” o jugadores de videojuegos, con la jerga y las prácticas propias de ese grupo; pasando por la identificación con el personaje de Nuxx en términos etarios, vivenciales o de género; hasta quienes entendemos la obra sobre todo como una crítica social-cultural-política-económica, en un sentido “floydiano” que se observa principalmente en The Wall, de cuestionamiento global a un orden injusto y a los daños que esa estructura de poder produce en las personas más vulnerables.
Seguramente habrá otras lecturas. De todos modos, una actuación sin fisuras, un guión ambicioso y una puesta en escena que logra la angustiante atmósfera buscada, invitan a disfrutar una obra desafiante, necesaria en la tarea de resquebrajar los muros que separan y distancian.
FICHA TÉCNICA
Obra: TETR1S – Unipersonal – Duración: 60 minutos.
Fechas y lugar: Miércoles 4, 11, 18 y 25 de octubre a las 21, en AREA 623, Pasco 623, CABA.
Dramaturgia y diseño sonoro: Violeta Ayzemberg.
Dirección: Bárbara Nahir Mercado.
Actuación: Sofía Siniscalco.
Entradas: TETR1S Entradas, Varias Fechas | Eventbrite
