
Diagnóstico: Cae la economía y se desploma el consumo
Las políticas económicas de Cambiemos llevaron a una irremontable recesión, con baja de salarios y alta inflación, que irá bajando en los próximos meses por un enfriamiento de la economía y un aumento del stock.
La actividad económica se contrajo en julio 5 por ciento respecto a igual mes del año anterior, la mayor caída en lo que va de 2016, y sumó en siete meses un descenso de 1,7 por ciento interanual, según estimó hoy el Centro de Estudios Económicos Orlando Ferreres.
De acuerdo con sus estimaciones, la actividad económica en julio tuvo una baja de 0,4 por ciento frente al mes anterior, en la medición desestacionalizada.
«En el inicio del segundo semestre, la actividad económica anotó su mayor caída en lo transcurrido de 2016», destacó el informe, que lo atribuyó a la «brusca» baja en la producción industrial que en julio fue de 6,4 por ciento interanual «afectada fundamentalmente por la dinámica del segmento alimenticio». El estudio precisó que la mayor retracción en julio se evidenció en el sector Construcción, con una merma de 16 por ciento interanual impulsada por la disminución de 20 por ciento en los despachos de cemento, y totalizó en siete meses una contracción de 11 por ciento.
«Estos valores, sin embargo, se ven influenciados por números muy positivos de inversión pública durante 2015, condicionados por la dinámica electoral», remarcó. Por su parte, el sector de Agricultura y Ganadería registró en julio un retroceso de 7 por ciento interanual, la décima baja consecutiva, y acumuló en siete meses un deterioro de 7 por ciento.
«Transcurridos los meses de mayor relevancia de la cosecha gruesa, el resultado para el séptimo mes del año refleja el impacto de la dinámica ganadera, con un descenso de la faena bovina en donde se manifiesta una reducción en el procesamiento de hembras, el cual se ha desacelerado en los últimos meses», explicó.
A su vez, el rubro Comercio mostró en julio una contracción de 6,8 por ciento interanual, evidenciando bajas tanto en la rama minorista como la mayorista «afectadas por la caída del consumo privado y la retracción de los principales sectores productores de bienes».