Testimonios de la represión a la murga: «Me tiraron al suelo para dispararme con una escopeta»

Un testigo denuncia que intentó ser fusilado. Otras que fueron atropelladas por un patrullero.

Una denuncia presentada por el fiscal General titular de la Procuraduría de Violencia Institucional, Miguel Palazzani, detalla según testigos qué ocurrió en la represión de la Gendarmería con balas de goma a la murga Los Auténticos Reyes del Ritmo en el cruce de las calles Charrúa y Varela, en la Villa 1 11 14.

Según Sandro González, vecino de la villa y víctima de la represión,los primeros gendarmes llegaron en un patrullero y una grua para transportar autos secuestrados. Señaló que bajaron dos gendarmes y dialogaron con él pero que el chofer del patrullero (que no había descendido) decidió avanzar igual y chocó con el móvil a dos mujeres, una de 16 años de nombre Ludmila.

González relató que pidió a los vecinos que se muevan para que pase el patrullero. Luego solicitó a los Gendarmes que guarden las armas, porque eran innecesarias y había menores cerca. Tras decir eso, según su relato, un gendarme lo empujó al piso y, ya tirado, le dispararon con una escopeta. Su hijo Jonathan Gonzalez, de 14 años, se cruzó y lo cubrió con el cuerpo. Por esta defensa de su padre recibió un impacto de bala en la pierna.

El testigo afirmó que salieron corriendo mientras el gendarme les seguía disparando, y que también comenzaron a disparar a todas partes, contra la murga en particular, contra los chicos y mujeres que se quedaron en la calle.

El testigo afirmó que salieron corriendo mientras el gendarme les seguía disparando.

Cuando terminó la violenta intervención, González, herido con perdigones por todo el cuerpo, fue a buscar a su hijo que estaba herido en la pierna. Como producto de la herida se le veía un hueso, lloraba del dolor y lo llevaron urgente al Hospital Piñeiro, donde los atendieron. «Hoy estoy seguro de que esa bala iba dirigida a mí, pero mi hijo se interpuso en el camino y le pegaron a él. Aunque fue un rasguño, está vivo de milagro. Por eso me pidieron los médicos que Jonathan quede en observación internado», dijo el testigo.

Tres hechos delictivos que terminaron en la balacera:

Según lo informado por el Ministerio de Seguridad, el viernes por la noche dos gendarmes habían resultado heridos durante un operativo en la villa 1-11-14. El operativo tenía como objetivo el secuestro de un cargamento de marihuana.

También el viernes, desde la mañana y a varias cuadras del lugar, sobre el barrio Illia 2, pegado a la villa 1-11-14, otros dos gendarmes que nunca fueron heridos custodiaban dos autos robados que debían ser remolcados por una grúa cuando se dispusiera de ésta.

Por la noche, mientras ensayaban, los integrantes de la murga fueron baleados.

Los testigos: 

Adriana Luján MIGUEZ presenció todo porque estaba junto con sus cuatro nietos en el ensayo de la Murga: Zaira (6), Zoe (4), Uriel (2) y Carlos Ariel Sulca (8). Señaló que este último resultó herido por las balas de la Gendarmería Nacional, recibiendo tres impactos de bala, una arriba de la ceja y otros dos en las piernas.

Gustavo Daniel FLORES, integrante de la percusión de la Murga, observó lo ocurrido y además, recibió dos impactos de bala de goma por parte de la Gendarmería Nacional, en su pie.

Víctor Ariel GOMEZ, integrante de la percusión de la Murga quien presenció toda la situación.

A su vez, María del Carmen ROJAS, que integra la murga, enseñando el baile a los chicos de 4 a 9 años, refirió que ese día habría alrededor de veinte nenes de esa edad, que uno de ellos, Carlos Ariel SULCA resultó herido y desea declarar por lo sucedido.

María Laura BENÍTEZ presenció todo lo realizado por la Gendarmería Nacional y que su hijo Jonathan GONZÁLEZ (14 años) recibió un impacto de bala de plomo en su pierna siendo atendido en el Hospital Piñeiro y luego en el Hospital Garrahan.

Por último, se estableció que Rosa GONZALEZ ese día llevó a seis de sus hijos al ensayo de la murga: Ailen (10), Yésica (13), Alexis (6), Omar (8), Lucas (4), Kevin (12) y que Miriam Irene VILLA, acompañó a su hija Kiara Villa (10) y a su sobrino Jesus Sabans (11), al ensayo de la murga. Que todos ellos presenciaron todo lo que realizó Gendarmería y que no resultaron heridos.