
La de Macri y Vidal sí va a ser una pesada herencia
Hace unos días, salí al cruce de los dichos de María Eugenia Vidal quien afirmó que cuando asumió “no había para pagar aguinaldos» y afirmé que “la Gobernadora (al Igual que Macri en lo Nacional) vive repitiendo eso en los medios de comunicación amigos pero no solo es inexacto, sino que la realidad es que Vidal entregará una Provincia mucho peor que la que ella recibió de Daniel Scioli, a pesar de tener aún más presupuesto”.

Me permito afirmar que a la luz de los hechos y el cuadro de situación que se visualiza en nuestro país, tanto Macri en lo nacional, como Vidal en el ámbito de la Provincia de Buenos Aires, entregarán a quien los suceda en sus respectivos cargos, respectivamente, un país y una provincia con una situación, laboral, social, productiva y económica mucho peor que la que ellos recibieron el 10 de diciembre de 2015.
Más aún, claramente, la actual situación económica e institucional nacional y provincial, son al día de la fecha claramente mucho y gravemente peores a las existentes al 10 de diciembre de 2015..
En lo que a la provincia se refiere el “10 de diciembre de 2015 había 3 mil millones de pesos en la Tesorería de la Provincia, sumados al flujo de 300 millones de pesos de recaudación diaria de ARBA. Eso eleva el saldo al 31 de diciembre a 9 mil millones. En octubre de 2015, a dos meses del cambio de Gobierno, se habían cancelo más de 1050 millones de dólares de deuda y se pagaron los sueldos correspondientes de la administración en tiempo y forma (15 mil millones de pesos). Todo esto a valores de ese entonces”,
Ellos mismos han admitido en documentos posteriores a su asunción que la deuda flotante solamente ascendía a 5 mil millones de pesos, sobre un presupuesto de 250 mil millones, es decir, un 0,5% del total del presupuesto 2015. Además, en su momento se puso a disposición de las nuevas autoridades la posibilidad de tomar créditos por 8 mil millones para engrosar las arcas de la Provincia, medida que primero Vidal rechazó y que luego tomó en 2016. Esta es la mejor prueba de la falacia que representa el supuesto e invocado estado de quiebra de la Provincia: si esto hubiera sido cierto, nadie le hubiera prestado plata a la Provincia”.
Con respecto al aumento de la deuda durante la gestión actual, “ese endeudamiento que comenzó en 2016 no hubiese sido necesario si a la Provincia le hubieran dado desde el Gobierno Nacional el mismo tratamiento en materia de Coparticipación que el que recibió la Ciudad de Buenos Aires. Eso fue compensado en diciembre de 2017 a costa del dinero de los jubilados, pero así y todo los bonaerenses somos testigos de la falta de gestión de Vidal en todos los órdenes: seguridad, educación, salud, producción, empleo, etc.”
En lo que al estado nacional se refiere, sin pretender realizar una enunciación exhaustiva, que excede en mucho nuestra expertís y los alcances de esta columna, baste mencionar a manera de ejemplo que al 10 de diciembre de 2015 nuestro país presentaba una economía pujante y con muy buen nivel de actividad, muy bajo nivel de endeudamiento, de desempleo, un mercado interno activo, acuerdos paritarios libres negociados durante 12 años sin solución de continuidad, al igual que la actualización del Salario Mínimo Vital y Móvil.
A partir de la gestión de cambiemos eso se revirtió y el año en curso, en cambio, vamos camino a una fuerte caída de la actividad económica estimada en torno al 4 %, una inflación que el mismo responsable de la economía estimo por encima del 40 %, un desmedido crecimiento de la pobreza, una fuerte pérdida del poder adquisitivo del salario y de los beneficios previsionales, el dólar se revalorizó un 115 % respecto del peso, la tasa de interés ronda el 60 % y la pérdida de divisas supera los 30 mil millones, todo lo cual configura una situación explosiva
Es necesario cambiar el rumbo de las políticas económicas, implementando políticas de producción, empleo y trabajo que generen empleo y crecimiento, para ello, hay que frenar las importaciones defendiendo la industria y la mano de obra nacionales, impedir el ingreso y egreso discrecional de capitales, poniéndoles plazos mínimos de permanencia de 2 o 3 años y poner plazos breves para el ingreso y la liquidación de divisas a los exportadores.
“Como con tantas otros temas, una cosa es lo que dicen para la tribuna y otra muy distinta es la que hacen y dicen de forma reservada.
La gente está cansada de excusas. Ya han transcurrido casi tres años de Gobierno de Cambiemos y el discurso de la pesada herencia para ocultar la propia incapacidad de resolver los problemas es algo que ya no corre más. Es fundamental que tanto el Presidente como la Gobernadora se hagan cargo de una buena vez de los cargos que ostentan y se pongan a gobernar, que es para lo que la gente los votó.
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