Fonseca, el economista que descolocó a Dujovne: “En España, por tener una offshore, debió renunciar el ministro de Industria de Rajoy”
“¿Cómo espera que vayan las inversiones a la Argentina si usted mantiene su patrimonio offshore?”, le dispararon el viernes en Madrid al ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne. El autor de la incómoda pregunta fue Jorge Fonseca, catedrático de la Universidad Complutense, quien consideró que «el presidente Mauricio Macri parece haber logrado instalar en la opinión pública que se trata de una cuestión normal».
Fonseca escribe artículos sobre economía desde hace 40 años, pero saltó a la fama mundial por esa pregunta a Dujovne. No consiguió que el ministro respondiera a su interrogante: “A diferencia de lo que ocurría en el gobierno anterior, mi patrimonio está perfectamente declarado y presentado ante la Oficina Anticorrupción”, eludió.
Argentino nacido en Córdoba, Fonseca vive en Madrid desde 1981. Doctor en Economía de la Universidad Complutense, donde enseña Economía Aplicada, es miembro del grupo de investigación internacional “Tendencias polarizantes en el sistema-mundo” que dirige el catedrático de la Universidad de Yale Immanuel Wallerstein.
A continuación les ofrecemos algunos tramos de la conversación que Fonseca sostuvo con Página 12. «En Europa, y particularmente en España, la percepción sobre las empresas y las cuentas offshore es más dura. El presidente Mauricio Macri parece haber logrado instalar en la opinión pública que se trata de una cuestión normal. Pero en España, por tener una empresa offshore, debió renunciar a su puesto José Manuel Soria, que era nada menos que ministro de Industria de Mariano Rajoy. Y los dos son conservadores, del Partido Popular», señaló.
«En todo el mundo los que no tenemos actitudes cómplices con la corrupción sabemos que una persona abre una offshore solo para evadir impuestos o lavar dinero. ¿Para qué, si no? Las otras argumentaciones son pretextos. Que un ministro tenga o haya tenido una offshore significa que opera u operó con dinero oscuro. Una offshore solo sirve para operar con dinero oscuro«, añadió el economista.
«El conjunto de las economías -agregó- está distorsionada por las economías especulativas. Muchas de las operaciones que antes se consideraban punibles dejaron de serlo y los grandes sectores financieros comenzaron a diluir la idea de lo que se entiende por lícito y lo que se entiende por no lícito. La Argentina es un ejemplo típico: el Gobierno quiere instalar en la sociedad la idea de que los procedimientos de sus funcionarios son legales y legítimos. Veremos si lo logra».
