
El sistema de comunicación de las bacterias podría utilizarse para detener la propagación y destruir el cáncer
Po: Guillermo Magadán

El cáncer amenaza la vida cuando las células cancerosas se comienzan a propagar a diferentes partes del cuerpo. Según el profesor adjunto de oncología, Senthil Kumar, este sistema de comunicación se puede utilizar para “indicar” a las células cancerosas cómo actuar, o incluso a morir cuando se les ordene.
“Durante una infección, las bacterias liberan moléculas que les permiten ‘hablar’ entre sí, dice Kumar, autor principal del estudio. “Dependiendo del tipo de molécula liberada, la señal indicará a otras bacterias que se multipliquen, evadan el sistema inmune o incluso que detengan su propagación. Encontramos que si se introduce la molécula para ‘detener la propagación’ en las células cancerosas, éstas no sólo detienen su propagación, sino que también empiezan a morir”.
En el estudio publicado en PLOS ONE, Kumar, y el coautor Jeffrey Bryan, profesor adjunto de Medicina Veterinaria, trataron células cancerosas pancreáticas humanas cultivadas con las moléculas bacterianas de comunicación, conocidas como ODDHSL. Después del tratamiento, las células cancerosas se dejaron de multiplicar, no pudieron migrar y empezaron a morir.
“Utilizamos células de cáncer de páncreas porque son las células cancerosas más robustas, agresivas y difíciles de eliminar que se pueden producir en el cuerpo humano”, dice Kumar. “Demostrar que esta molécula no sólo puede evitar que las células cancerosas se diseminen, sino también que causa que mueran, es muy emocionante. Debido a que este tratamiento se muestra prometedor en un cáncer tan agresivo como el cáncer de páncreas, creemos que podría utilizarse en otros tipos de células cancerosas, y nuestro laboratorio está en el proceso de probar este tratamiento en otros tipos de cáncer”.
Kumar dice que antes de comenzar con pruebas en animales y humanos, el siguiente paso en su investigación es encontrar una manera más eficiente de introducir las moléculas en las células cancerosas.
“Nuestro mayor desafío ahora es encontrar una manera de introducir estas moléculas de una manera efectiva”, añade Kumar. “En este momento, sólo somos capaces de tratar las células cancerosas con esta molécula en un entorno de laboratorio. Estamos trabajando en un método mejor que nos permitirá tratar a los animales con cáncer para ver si esta terapia es realmente eficaz. Los resultados de las primeras etapas de esta investigación son prometedores. Si los estudios adicionales, incluyendo estudios en animales, tienen éxito, entonces el siguiente paso sería llevar esta aplicación a las clínicas”.