En Lomas de Zamora existen alrededor de 30 barrios populares que se abastecen eléctricamente gracias a lo que se conoce como «transformadores comunitarios» o bocas de expendio.
La empresa distribuidora de la zona, Edesur, tiene a su cargo el mantenimiento de estas torres, cada vez más obsoletas y con reiterados problemas en su funcionamiento, sobre esto refiere un informe del Observatorio de Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo OETEC.
«Edesur tarda 48 hs en ir a cambiar un fusible y nunca se dignaron a re-potenciarlas», advierte el referente de la Multisectorial de Lomas de Zamora, David Arias, en diálogo con OETEC. Hace dos meses que estos vecinos sufren cortes de luz que rondan los tres días consecutivos, en vecindarios donde se requiere de la electricidad para todo (electro-intensivos).
La empresa no les da una respuesta porque no los reconoce como usuarios, y ante los sucesivos cortes, los vecinos de estas barriadas terminan recurriendo -en el mejor de los casos- a electricistas particulares. En su defecto, decenas de familias deben volver a la leña para cocinar y a los braseros para calentarse, «como hace dos siglos», expresa al respecto, Arias.-
«El mantenimiento de estas redes generalmente está a cargo de los municipios y los vecinos no son tenidos en cuenta como usuarios por la empresa distribuidora, en este caso, Edesur. Pero lo cierto es que la prestataria debe encargarse de mantener estos transformadores», explica al OETEC David Arias.
Ante un corte de luz, las familias que dependen de este tipo de dinámica eléctrica no encuentran un canal efectivo de reclamo ante la empresa, por lo que en épocas de altas o bajas temperaturas suelen estar alrededor de 24 a 72 horas sin luz. http://www.oetec.org/nota.php?id=4723&area=1
Esto es precisamente lo que ha ocurrido durante los últimos dos meses. Según Arias a ello se le suma «el agravante de que estos barrios son electro-intensivos y por la falta de suministro en la red eléctrica se quedan sin agua, y en muchos casos, sin calefacción».
El resultado es el mismo para todas las familias empobrecidas energéticamente: la cocina a leña y la calefacción por braseros, lo cual termina derivando en trágicos accidentes al interior de los hogares producto de la inhalación de monóxido de carbono o por incendios.
Servicio deficiente, empresa indiferente
Arias indica que la solución en estos casos llega muchas veces «a través de electricistas particulares que les cobran a los vecinos una cuota por el mantenimiento del servicio, cambiando de fase a aquellos que se quedan sin suministro».
Pero el pasado 20 de Junio, en plena vigencia del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO), los habitantes de estos barrios tuvieron que movilizarse hasta la gerencia técnica de Edesur en Lomas de Zamora. «Estaban cansados de esperar una solución por parte de la empresa luego de pasar 4 días sin servicio eléctrico en medio de las bajas temperaturas», sostiene el referente lomense.
Dentro de Lomas de Zamora, los vecindarios más afectados son los de Villa Fiorito e Ingeniero Budge, por la cantidad de personas que en ellos habitan. «Pero los casos se repiten -señala el referente de la Multisectorial lomense- en Lanús, Quilmes y Almirante Brown, en donde la empresa ha instalado estas bocas de expendió ya hace más de 10 años».
Crónica de una desinversión anunciada
En las últimas semanas, Edesur se mantuvo en boca de todos. La empresa fue seria y públicamente cuestionada por amplios sectores de la sociedad. Incluso un conjunto de Intendentes del Conurbano Bonaerense (Insaurralde, Mendoza, Watson y Ferraresi) manifestaron su descontento con el funcionamiento de la empresa.
Asimismo, el Defensor del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires, Guido Lorenzino, solicitó ante el ENRE la quita de la concesión a Edesur alegando que la empresa «obtuvo ganancias millonarias en los últimos cuatro años [pero] no hizo las inversiones necesarias para mejorar el servicio a los usuarios, ante la falta de control del gobierno anterior»
Lo cierto es que, como este Observatorio adelantó a comienzos de año, tanto Edesur como Edenor venían anticipando desde agosto de 2019 el desmejoramiento en la calidad del servicio a raíz de que ambas licenciatarias habían decidido dar de bajas inversiones obligatorias en el marco del congelamiento dispuesto por la gestión Cambiemos.
Fuente: Belén Ennis www.oetec.org
