DENUNCIAN A UN FISCAL POR CAUSA ARMADA EN CONTRA DE 3 POLICÍAS

En exclusiva para IB24, el abogado de los policías, explica el trasfondo de una causa que esta direccionada para culpar a 3 policías que ni siquiera estaban en el lugar cuando se cometió un delito.

José Luis Fabris, abogado, en su presentación judicial, explica: «vengo a formular una denuncia en contra del Fiscal Dr. José Ignacio Calonje de la Unidad Fiscal N°24, de la Ciudad de Azul por mal desempeño de sus funciones, y/o cualquier otra falta o violación a las normas legales en que haya incurrido.» Esto al señalar que el fiscal «ha utilizado hechos falsos e irregulares como elementos de prueba en contra de mis asistidos, violando la regla de exclusión, ya que la Justicia no puede beneficiarse de hechos ilícitos, conforme los Fallos Montenegro, Fiorentino y Reginald Rayford de la CSJN.»

Fabris, además describe: «Soy Letrado Defensor de 3 policías de la Provincia de Buenos Aires en la IPP
N°4002/2021, que se iniciara el 3-9-21 por una denuncia de presunta extorsión y/o concusión»

La denuncia en contra de los tres acusados, la realizó Máximo Daniel Basanta que dijo: “…Que en el día de
la fecha 3/9/2021, siendo las 15:40 horas aproximadamente, circunstancias que se hallaba en Ruta Provincial Nº 51 kilómetro número 533, la ex estación de servicio vieja, sito a tres kilómetros aproximadamente de la rotonda Lamadrid Laprida en dirección a la ciudad de Olavarría, al momento de encontrarse por realizar trasbordo de mercadería con camión perteneciente a la empresa de nombre comercial “Supremo”, de la ciudad de Cañuelas, siendo este un camión de tamaño grande, no recordando marca y modelo, pero si su dominio AE304IG, cuyo conductor resulta ser el ciudadano Carlos LUIZ, número telefónico personal (02226) 477698 el cual ya se encontraba esperándolo en este sitio de mención. Que al momento que el dicente se hallaba atracando para posicionar su camión en el lugar más cómodo para la descarga, detrás del  mencionado; mientras que su compañero el ciudadano Gastón REBOLO quien se encontraba debajo del camión, precisamente por detrás de este, haciéndole señas para que este estacionara correctamente»

Agrega en dicha denuncia, Basanta que «estaciona, descendiendo del camión, pasando por delante en dirección al sector del acompañante, observa que detrás de su camión se encontraba estacionada una camioneta la cual describe como una camioneta marca FORD modelo RANGER no aprecia dominio de color blanca en su totalidad, toda lisa sin inscripciones, con algo que le llamo mucho la atención ya que la misma en la parte frontal de la trompa tenia adosada balizas del tipo que utiliza la policía, las cuales en un primer momento se encontraban apagadas, pero instantes después, cuando estos sujetos posicionan esta camioneta en dirección diagonal con la trompa apuntando para el sector donde se encuentra la estación de servicio mencionada anteriormente, estas personas las encienden, siendo estas de color azul.»

Basante, también denuncia «Que inmediatamente después de esto, observa que su compañero se pone
a su par, mientras que desde el interior de la camioneta descienden dos masculinos, uno que se encontraba sentado en la parte delantera en el sector del acompañante y otro de la parte trasera lado del conductor, pudiendo describir al primero como “una persona de sexo masculino, de unos 34 años aproximadamente, de estatura alta de unos alrededor de 1,81 centímetros, de contextura grande robusta, de cabellos color castaño corto en su parte baja mientras que su parte alta eran lacios parados, de tez clara pero no blanca, brazos largos,
mismo poseía barbijo de color oscuro colocado, vestía pantalones largos, del tipo jeans, de color azul oscuro, en su parte superior vestía chaleco inflable de color oscuro, sin capucha, remera manga corta color blanco, no recordando calzado que tenía colocado. Que respecto a la forma de hablar mismo poseía una vos suave, canchera, ningún acento especifico, con una narrativa fluida”, mientras que el segundo, el que sale de la parte trasera lo puede describir como “una persona de sexo masculino, de unos 35 años de edad, de estatura baja, de
contextura gruesa, rellenito, de color de cabellos morocho claro, pelo corto, con ondas en su parte superior, de tez clara pero no blanca, piernas y brazos cortos, mismo no poseía barbijo colocado, poseía barba color castaño, corta, tipo balbo, rostro chico, el cual vestía pantalones largos, no recuerda tipo, de color oscuro, en su parte superior poseía una campera mangas largas color negra con cierre, sin capucha, no recuerda calzado. Qué mismo poseía un tipo de voz también suave, sin ninguna acento, también fluida su narrativa, canchera”. Que el sujeto que desciende de la parte delantera de la camioneta, se acerca hasta donde se encontraba el
denunciante, allí se identifica como personal perteneciente al Ministerio de Salud, donde comienza a solicitarle la documentación del camión, de la mercadería transportada, hoja de ruta, preguntándole que se encontraban haciendo allí, a lo que el denunciante le manifiesta sus motivos de hallarse este lugar y regresa hasta el interior del camión en busca de la documentación solicitada; para después de esto regresar nuevamente hasta donde se encontraba esta persona y entregársela; quedando posicionado a su izquierda este sujeto que examinaba la documentación y a su derecha la puerta del conductor de la camioneta, habitáculo en el cual se hallaba sentado el tercer masculino restante»

En esa denuncia mencionada, se describe que Basanta, observa que toma una arma de fuego que se encontraba en la parte del torpedo de la camioneta y la coloca en su cintura a la vista del denunciante, para después de esto descender del rodado y pasar por detrás del dicente hasta colocarse al lado del masculino que se hallaba visando la documentación, pudiendo describir a esta sujeto como “una persona de sexo masculino, de unos 37-38 años aproximadamente, de estatura mediana, de contextura mediana, de cabellos color castaño oscuro, corto en su parte baja mientras que su parte alta eran cortos medios parados, de tez oscura pero no negro, brazos normales, mismo poseía barbijo de color oscuro negro colocado, vestía pantalones largos, tipo cargo, de color oscuro, en su parte superior vestía una campera de color negro, sin capucha, no recordando calzado que tenía colocado. Que respecto a la forma de hablar mismo poseía una voz gruesa, ronca, mas tranquilo, ningún acento especifico, con una narrativa fluida, sin titubeos”, donde dicha documentación luego de ser examinada es devuelta y allí escucha que este masculino le refiere que no se podía hacer lo que el denunciante se encontraba haciendo, dicho trasbordo de mercadería en un lugar habilitado para tal fin, que le secuestraria los vehículos y le decomisaría la mercadería, que el denunciante al estar en conocimiento de esto, manifiesta en vos alta que se comunicaría con personal del Destacamento de Policía Vial para informarle de lo sucedido,lo cual es escuchado por este masculino, quien inmediatamente trata de evitar esto refiriendo que al ser ellos un ente gubernamental esto acarrearía problemas para los efectivos a quien el denunciante quería llamar, repitiéndole en varias ocasiones que no lo hiciera y luego de esto le refiere claramente que “…bueno podemos arreglar con un café…”, lo cual refiere tres o cuatros veces momentos que caminaban alrededor de los vehículos, ya que el denunciante no había entendido la indirecta de esta persona, la cual una vez captada, por miedo a que le pase algo, hace que el denunciante se dirija hasta la parte delantera de su camión y del interior de su billetera que se encontraba sobre el asiento del acompañante, retira la suma de tres mil pesos argentinos (3.000), discriminados en billetes de cuatro (04) papeles de 500 pesos y uno (01) de 1.000, suma que es entregada de inmediato a esta persona, la cual toma, refiriendo “…Que no vuelva a pasar nunca más esto, que de ultima lo hagan en la parte trasera de la Estación de servicio vieja…” Sic., para después de esto abordar los tres masculinos dicha camioneta y retirarse del lugar por la Ruta Nº 51 en dirección a la ciudad de Olavarría. Posteriormente a esto, circunstancias que dialoga con él con el conductor que se encontraba delante de él toma
conocimiento que cuando el dicente se dirige hasta el interior de su camión en busca del dinero para entregar, a este le sustraen 1500 pesos argentinos. Consultado al denunciante con que normalidad realiza este tipo de trasbordo en la ruta mismo refiere que este tipo de trabajo es realizado una vez por semana, los días viernes entre los horarios de 15:00 y 17:00 hs, solamente por una cuestión de abaratar costos, que desde este sector antes mencionado, el dicente se dirige hasta la ciudad de Laprida donde realiza ventas de esta mercadería recibida.
Que consultado al dicente si puede referir el tipo de arma que se le es exhibida mismo refiere que no tiene mucho conocimiento de armas, pero que por su formato está seguro que es una pistola del tipo 9 milímetros, como la utilizada por el personal policial. Que consultado si pudo ver desde donde vino la camioneta momentos antes de que lo abordara mismo refiere que venía desde el lado de Laprida dirección Olavarría»

Cabe destacar que los tres policías, al momento de los hechos, estaban a varios kilómetros del lugar indicado, cumpliendo con el servicio asignado por la Institución, que consiste en la inspección de armerías. La misma defensa de los acusados, aportó al caso, las pruebas irrefutables de esto que no es un dato menor, pues coloca al personal investigado en sitio y quehacer totalmente distinto al indicado en la supuesta denuncia de los ilícitos detallados.

El señor Basanta se presenta a las 23.45 conforme surge de pie de página de la denuncia, donde dice -aparentemente- haber sido extorsionado por tres policías, pero él no ve la patente eso lo expuso Basanta a las 23.45hs, pero el detalle importante radica en la segundo folio de la instrucción donde la figura la firma de un Principal, donde asegura que Basanta denuncia la extorsión por parte de policías que se trasladaban en una Ford Ranger de color blanco, y él pone el número de patente – el Principal es quien pone ese dato-. Mientras en la hoja siguiente, otro policía, instructor de la Comisaría de Laprida, comunica al juez de Garantías, al fiscal y al Defensor Oficial, que una camioneta Ford Ranger con un nro y serie determinado, cuyos policías en su interior fueron los que lo extorsionaron. Esto fue comunicado a la Justicia a las 21.30hs dos horas antes aproximadamente que Basanta hiciera su declaración policial por el hecho expuesto. ASsí queda demostrado que el sumario está armado con otros oficiales de la Policía y es falso.

Es el fiscal Calonje quien pese haber visto tan evidente irregularidad en el procedimiento, no hizo absolutamente nada.