Cristina volvió abrazada por el pueblo
Miles de militantes coparon Aeroparque para recibir a la ex presidenta que arribó en medio de un fuerte operativo de seguridad. «Quiero agradecerles en este día especial», dijo.
La expresidenta llegó a Buenos Aires a las 22:10 a bordo de un avión de línea de Aerolíneas Argentinas procedente de Río Gallegos.
La ex mandataria se retiró casi de inmediato a su domicilio en el barrio porteño de Recoleta, pero antes hizo una pausa para saludar a los cientos de manifestantes que desde las 20 se comenzaron a congregar en torno a la aeroestación, con banderas, bombos y cánticos de respaldo, en una demostración de su poder de convocatoria, impulsado desde anoche por los referentes de La Cámpora a través de redes sociales.
Como consecuencia de esta convocatoria, la marcha del auto blanco en que se retiró la ex presidenta y de los autos de custodia fue muy lento, dada la cantidad de simpatizantes que prácticamente cortaron el tránsito por la Av. Costanera.
«Si la tocan a Cristina que quilombo se va amar» y alusiones hacia el juez federal Claudio Bonadio fueron los principales cánticos de los malitantes, que fueron convocados por la dirigencia kirchnerista, sobre todo desde La Cámpora, a través de las redes sociales.
Cientos de colectivos y autos estacionados en doble fila a lo largo de la Costanera, en una fila similar a la extensión de la pista del aeropuerto, fueron los vehículos que llevaron a los simpatizantes kirchneristas.
Sin embargo, tal vez por las condiciones climáticas, si bien el movimiento de vehículos rentados y de automóviles fue muy numeroso, la cantidad de simpatizantes fue menor que los que vinieron a esperar a la ex mandataria en abril último, cuando vino a declarar ante el juez Claudio Bonadío.
La presencia de la ex mandataria es una demostración de fuerza en momentos en que el kirchnerismo sufre una embestida por parte del poder judicial.
Frente al departamento de Cristina Fernández de Kirchner, en Recoleta, también hay una importante cantidad de militantes y no se descarta que la ex mandataria se dirija desde allí a la militancia reunida, rodeada de sus dirigentes leales.