CRIMEN DE ODIO EN BARRACAS: MURIÓ LA TERCERA VÍCTIMA DE FEMICIDIO
Andrea Amarante, 42 años, estaba internada en el Hospital Penna con el 75% de su cuerpo quemado.
Luego del ataque realizado por Justo Fernández Barrientos, quien está detenido por haber prendido fuego a un hotel en Barracas contra 4 mujeres, se cobró la tercera víctima.
Andrea Amarante, una de las cuatro mujeres atacadas durante un incendio provocado por un femcida, falleció en el Hospital Penna. Originaria de Neuquén, Amarante tenía 42 años y había sobrevivido a la tragedia de Cromañón.
Junto a Mercedes Roxana Figueroa y Pamela Fabiana Cobas, Andrea Amarante estaba refugiada en una pensión de Barracas. Allí convivía con su pareja, Sofía Castro Riglos. Allí, Justo Fernández Barrientos, de 67 años, perpetró el ataque en el edificio ubicado en la calle Olavarría al 1600, en donde inició un incendio para matar a quienes estaban habitando el lugar. Luego del ataque realizado por el femicida, Cobas murió, siendo la primera de las víctimas fatales. Destino compartido por Figueroa quien falleció días posteriores tras las quemaduras en el 90% de su cuerpo.
El ataque se produjo el lunes pasado por la madrugada en la pensión ubicada en la calle Olavarría 1621, Barrientos, inquilino en el lugar, venía hostigando desde hace tiempo a las mujeres, se refería a ellas como «engendros», «tortas» y «gordas sucias», decidió arrojar una molotov a la habitación donde dormían.
Amarante, con el 75% de su cuerpo quemado, internada grave el domingo no resistió más. Oriunda de Neuquén, Andrea residía en Buenos Aires ace varios años, intentando mejorar su vida. Pese a las cuantiosas dificultades económicas que trasuntaba al punto de estar en situación de calle. Fue revictimizada por su condición de género en una sociedad en donde el odio que movilizó a Barrientos para cometer un crimen de odio atroz.
Sofia Castro Riglos, con 42 años, y pareja de Andrea, es la única sobreviviente. Castro Riglos aún permanece en el Hospital del Quemado recuperándose de sus heridas. Si bien fue la que menos lesiones sufrió, su recuperación aún está en curso.
El caso está a cargo del Juzgado federal en lo Criminal y Correccional N°14, constituye un hecho trazado por la vulnerabilidad que afecta a las mujeres en un entorno de pobreza extrema. En tanto que el juez Edmundo Rabbione, que subroga el Juzgado, deberá determinar si el apresado es o no inimputable. El magistrado todavía no definió si le aplicará al acusado el agravante del artículo 80 del Código Penal: si las tres muertes fueron femicidios agravados por el odio al género o a la orientación sexual, identidad de género o su expresión.
EL DISCURSO ODIANTE DEL OFICIALISMO
Totalmente aberrante resultan, ante lo acontecido, las palabras de Nicolás Marquez, biógrafo e íntimo del presidente Milei, quien declaró: “Hay conductas objetivamente sanas y conductas objetivamente insanas. Entonces, cuando el Estado promueve, incentiva y financia la homosexualidad, como lo ha hecho hasta la aparición de Javier Milei en escena, está incentivando una conducta autodestructiva”.
