La OTAN se prepara para enviar sus tropas a Turquía de ser necesario
Lo aseguró en rueda de prensa el secretario general de la OTAN, el noruego Jens Stoltenberg. Los 28 países de la Alianza Atlántica del Norte «están listos para enviar tropas a cualquiera de nuestros aliados, también a Turquía, cuando sea necesario».
«La OTAN los defenderá. La OTAN está sobre el terreno. La OTAN está lista», manifestó Stoltenberg en un mensaje que es válido para los países del Este así como también para los del Sur, incluida Turquía, «nuestro segundo Ejército más numeroso».
Se cumplió una semana desde que la aviación rusa comenzó a bombardear posiciones yihadistas del Estado Islámico (EI), según el Kremlin. Pero Stoltenberg ha insistido por segunda vez en tres días con este tema: «Mi preocupación es que los rusos no se dirigen principalmente contra el EI, sino contra otros grupos de la oposición. Además, están apoyando al régimen sirio (de Bachar el Asad) (…) y eso no contribuye a llevar la paz al país», destacó el secretario general al ingresar a la reunión con los 28 embajadores de la alianza militar. «Hemos visto ataques (rusos) aéreos, ataques desde el mar con misiles de crucero e incursiones en el espacio aéreo turco», subrayó para después anunciar que se reunirá con el ministro de Defensa turco para abordar y analizar la situación. «Estamos en constante contacto con el Gobierno de Ankara», ha explicado Stoltenberg.
Stoltenberg informó que la Fuerza de Reacción de la OTAN «tendrá una capacidad de despliegue en 48 horas».
En conferencia de prensa, luego de la reunión de los 28 ministros de Defensa, Stoltenberg informó que la Fuerza de Reacción de la OTAN duplicará su número de efectivos hasta los 40.000 y que además «la fuerza spearhead tendrá una capacidad de despliegue en 48 horas».
El secretario general anunció que la estructura y capacidades para desplegar la fuerza de acción rápida de la OTAN puede ya desplegarse en escenario del Flanco Sur para proteger a uno de los aliados y volvió a condenar «las recientes violaciones del espacio aéreo de Turquía» por parte de aviones de combate rusos, algo que consideró «inaceptable».
