
“Motivos salariales”: la Facultad de Agronomía de la UBA perdió cerca del 15% de su planta docente
El desfinanciamiento en la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (FAUBA) está afectando el funcionamiento pleno del establecimiento educativo, situación que perjudica tanto a estudiantes como docentes. Entre renuncias y jubilaciones anticipadas por bajos sueldos, se perdió alrededor del 15% de la planta docente de la principal institución educativa que provee de especialistas al sector rural.
Entre 2023 y 2025, renunciaron 77 docentes (el 11% del plantel rentado) y se registraron 25 jubilaciones anticipadas. Puntualmente, FAUBA perdió 60 investigadores activos (8,5%), y las renuncias se duplicaron respecto de 2020-2022, con un incremento del 103%.
Los datos corresponder al informe presentado por la decana de FAUBA, Adriana Rodríguez, quien expuso las consecuencias de la falta de implementación de la Ley de Financiamiento Universitario por parte del Gobierno nacional.
“El 40% de los docentes que renunciaron manifestaron motivos económicos o salariales”, explica Rodríguez en el documento, donde también remarca que el mismo período registró a 43 docentes que solicitaron licencias sin goce de sueldo (6%) y 5 redujeron su dedicación exclusiva para trabajar en otros ámbitos. A su vez, 22 docentes sumaron cargos en otras universidades, evidenciando la dura necesidad de pluriempleo por parte de muchos argentinos para vivir.
TODO RESTA
“La actividad científica también se vio fuertemente afectada: las becas de maestría y doctorado descendieron de 48 en 2023 a 15 en 2025, y los subsidios de investigación pasaron de 113 a 0 en el mismo período. Además, la falta de fondos impidió la adquisición o reparación de equipos por más de 370 mil dólares y la ejecución de programas nacionales de equipamiento por casi un millón de dólares”, apunta el documento.
Al respecto, Rodríguez marca que la FAUBA perdió entre 2023 y 2025 un 38% de los convenios con el sector privado y un 46% con el sector público, con una caída total de más del 50% en ingresos por transferencia tecnológica.

“Pérdida de docentes e investigadores, reducción de becas y deterioro de la infraestructura. Es urgente garantizar los recursos para sostener la universidad pública”.





