Dos médicos porteños murieron por no haber recibido la vacuna del coronavirus
Un reconocido cirujano plástico que regeneraba tejidos de personas quemadas en el Hospital del Quemado y una médica de guardia del hospital Fernández de 56 años fallecieron de Coronavirus por no haber recibido la vacuna del coronavirus a tiempo .
María Rosa Falcone:
Ignacio Previgliano, director del Hospital Fernández, se refirió hoy a la muerte de una médica de ese centro de salud por coronavirus, que se enfermó mientras esperaba su turno para ser inoculada. Explicó que ella no había querido darse la vacuna Sputnik V hasta que salió el artículo de The Lancet avalando su seguridad. “Tenía turno para el 23 de febrero, pero se enfermó antes”, dijo, y explicó que el remanente de dosis se había repartido a otros centros de salud.
Previgliano explicó, en diálogo con LN+ en el programa Más Mañana, que María Rosa Fullone, de 56 años, quien se desempeñaba hacía 12 en el Fernández como ayudante de guardias especiales, fue parte del “20% de médicos” que no quiso anotarse en la primera tanda de vacunas.
Carlos Emilio Sereday
Tenía 66 años y era un reconocido cirujano plástico con especialización en quemados. Según cuentan sus colegas, continuó trabajando incansablemente durante toda la pandemia. Pero en enero se contagió de coronavirus y cursó un cuadro grave. Falleció este martes en el Hospital Mater Dei, donde también trabajaba. Allí estaba internado intubado desde hace tres semanas por falla respiratoria.
Desde ese sanatorio se realizó una misa de despedida por un médico muy querido en la comunidad: participaron más de 300 personas en un Zoom que se avisó con muy poca anticipación.
Carlos Emilio Sereday era Jefe de la Unidad Cirugía Plástica del Hospital de Quemados de Buenos Aires, donde realizaba más de 600 procedimientos por año. Docente apasionado, formó a numerosas camadas de residentes y concurrentes. Muchos de ellos le están rindiendo homenaje por estas horas.