Elecciones en Uruguay: El “efecto Macri” favorece al Frente Amplio, que suma adhesiones
El Frente Amplio (FA) de la República Oriental del Uruguay, que lleva al ingeniero y ex intendente de Montevideo, Daniel Martínez, de 62 años, como candidato a presidente, aumentó en cuatro puntos su intención de voto y alcanzó un 34 por ciento, superando así al 30 por ciento que registraba una encuesta realizada en agosto. Lo hizo público un sondeo de Equipos Consultores que se divulgó en Montevideo a 31 días de las elecciones del próximo 27 de octubre.
Escribe Alejandro C. Tarruella
La sociedad le responde al FA
El Frente Amplio mejora así su posición y los votos lo llevarían al balotaje frente a la derecha. Se unirían eventualmente, de llegarse a esa instancia, el Partido Nacional (PN) y su candidato a presidente, el abogado y ex senador Luis Lacalle Pou, de 46 años, que mantiene un 26 por ciento sin crecer ni perder en la consulta aludida, y el Partido Colorado (PC), que lleva como candidato a Ernesto Talvi, que cayó de 16 a 12 por ciento en la intención de la ciudadanía.
El director de Opinión Pública de Equipos, Ignacio Zuasnabar, dio a conocer el sondeo en el canal 10 de la televisión uruguaya y expresó: “Es la mejor medición del FA en lo que va del año”. Se supone en círculos del Frente Amplio que en parte el cambio de ánimo en la ciudadanía está vinculado al derrumbe de Mauricio Macri y su coalición Cambiemos y Juntos por el Cambio, que perdió las PASO del 11 de agosto, mostrando las fisuras del modelo neoliberal en ejercicio. En Uruguay vinculan el modelo Macri a la propuesta de Lacalle Pou, y existe en la ciudadanía una suerte de etapa de decepción local ante lo que, en estos años, apareció como una continuidad del régimen que se impuso en Argentina.
Zuasnabar sostuvo en su exposición que ningún partido ganará la primera vuelta, que en Uruguay exige la mayoría absoluta, y habrá un balotaje el 24 de noviembre entre Martínez y Lacalle
En cuanto a indecisos en las elecciones presidenciales y legislativas del 27 de octubre, suman actualmente un 11 por ciento, lo que estimó como «totalmente normal» en el análisis histórico, y en caso de haber mayor interés por el candidato del Frente Amplio, la franja sería decisiva para lograr retener la conducción del país.
La derecha observa, además, con singular interés, a la formación Cabildo Abierto, que tiene como candidato a presidente al ex comandante del Ejército Guido Manini Ríos (2015-2019), que tendría hoy una intención de voto en torno al 9 por ciento. Esos votos irían en su mayoría a Lacalle Pou. El militar fue destituido por el presidente Tabaré Vázquez luego de que el general cuatro estrellas le solicitara una entrevista para exponerle su discrepancia con el accionar de la Justicia ordinaria sobre un sargento acusado de violaciones a los Derechos Humanos en los años 1970. Hoy Manini Ríos es llamado “el Bolsonaro uruguayo”.
Con Macri la derecha cae
En estos días, el “efecto Macri”, analizado con preocupación en círculos cercanos al candidato Lacalle Pou, podría convertirse en un interlocutor inesperado en el último tramo de la campaña presidencial
La caída de la economía argentina, el juego perverso de multinacionales, formadores de precios, bancos y variantes de la usura, además de la creciente pérdida de puestos de trabajo, cierre de escuelas y fábricas en provincia de Buenos Aires, Capital Federal y provincias como Córdoba y Santa Fe en particular, es seguida por los votantes uruguayos.
Encuestadores de diferente origen siguen el efecto de la vinculación que hacen los electores de ese estado de cosas, y lo vinculan directamente a las ideas que esgrime la derecha uruguaya a través del candidato que tiene la mayor intención de voto para la jornada del 27 de octubre. El director de Opinión Pública de Equipos, Ignacio Zuasnabar analizó, posiblemente debido al escenario descripto, dos características de la elección que viene.
Por una parte, dijo, “no hay candidatos extremadamente potentes en su imagen”, y en segundo término dio una pauta que los analistas del Frente Amplio observan con sumo interés. Zuasnabar expresó que hay en esta elección una “mayor volatilidad del voto que en otros ciclos electorales”. Es allí donde desde el Frente Amplio estiman que se unen dos elementos: el síndrome negativo de Macri que afectaría a la derecha en la contienda electoral, y, por ende, una mayor captación de votos por el frente ante la alternativa de definir a Lacalle Pou como un seguidor de Macri en el Uruguay. Ese efecto puede ser altamente negativo para la derecha, señalan analistas del FA.
De ese modo, en el balotaje del 24 de noviembre próximo se registraría la siguiente situación: Por una parte, los candidatos serían Daniel Martínez, por el Frente Amplio, y Luis Lacalle Pou. El efecto Argentina aportaría que el 27 de octubre la fórmula Alberto Fernández y Cristina Fernández ganaría con una considerable diferencia de votos en favor del Frente de Todos que conduce el peronismo, y favorecería con mucha fuerza a Martínez.
Los 4 puntos que el Frente Amplio ganó en solo un mes de mediciones, estaría marcando esa tendencia, que puede consolidarse. La analizan positivamente en el Frente Amplio y la temen más cada día en el equipo de Lacalle Pou, quien, por otra parte, es hijo del ex presidente Luis Lacalle (1990-1995), que trabajó de joven en España junto a las juventudes franquistas y dejó un recuerdo nada edificante en la política uruguaya.
El Frente Amplio analiza en estos días qué es lo que cambia en la formulación de la propuesta política al pueblo, y qué es lo que permanece para la comunicación.
