Con sólo el 50% del monto indemnizatorio en 8 cuotas, la empresa radicada en San Luis, deja de fabricar y baja sus persianas.
Luego de 70 años de historia, Zanella no pudo sobrevivir. Su dueño Walter Steiner decidió decretar la muerte de esta emblemática marca y negocia su venta, sacó a remate todas sus maquinarias y motos. A los trabajadores despedidos, les ofrece el 50% de la indemnización en ocho cuotas y la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) denuncia que es ilegal.
Lideró el mercado de las motos y posicionó la marca como referencia de la baja cilindrada. No obstante el pasado 27 de noviembre, Zanella llamó a una Asamblea General de Accionistas en San Luis. El orden del día dice: «consideración de la venta de la marca Zanella y otras marcas y derechos de propiedad de la sociedad y autorización de activos muebles e inmuebles». Ya tienen un interesado en firme.
Primero fue el cierre de la planta marplatense, luego desactivó la fábrica de Cruz del Eje en Córdoba y despidió a una treintena de trabajadores de San Luis. Le quedaba en pie el emblemático complejo de Caseros, ubicado sobre la calle Juan Zanella, como un símbolo de lo que supo ser. En octubre, Steiner despidió a 75 trabajadores y sólo dejó parte de la administración en pie.
Salvo en Mar del Plata, en el resto de los casos, los trabajadores tuvieron que suplicar para poder cobrar la indemnización. Ariel Torres, secretario adjunto de la seccional Tres de Febrero de la UOM denuncia: «A Zanella nunca le aprobaron el procedimiento preventivo de crisis, sin embargo, ofrece a los trabajadores pagarles el 50% de la indemnización en ocho cómodas cuotas, eso es ilegal. La gente está desesperada, fueron despedidos en octubre y aún no cobraron lo que les corresponde».
Si bien el acuerdo se iba a firmar en la provincia de Buenos Aires, algunos trabajadores denuncian que: «Como es ilegal que nos paguen la mitad, ahora nos están llamando para que firmemos en Ciudad Buenos Aires. Algunos tienen más de treinta años, hace cuatro meses que no recibimos ni el sueldo, ni las indemnizaciones, estamos endeudados y ni sabemos como pasaremos las fiestas».
Antes de los despidos, los trabajadores le pedían a Steiner que por lo menos les de motos en parte de pago, para poder venderlas. La respuesta, siempre fue la misma: «Si quieren motos, las compran y de contado», les decía. Sólo les daba entre $2.000 y $5.000 por semana, según como se comportaran.
El 5 de diciembre, Zanella hizo el primer remate de su maquinaria metalúrgica con la empresa Adrián Mercado. Remató pulidoras, cortadoras, agujereadoras, tornos, líneas de montaje a cadena, línea de pintura y lavado, autoelevadores y prensas.
Este jueves rematará camiones, grupos electrógenos, autos y semirremolques. El 13 de diciembre 300 motos, scooters, utilitarios de 150 y 300 kilos de cargas, areneros, cascos, cuatriciclos y hasta motos Patagonia Eagle, entre otras.
En enero pasado, Steiner, dio el último reportaje a BAE Negocios, en ese momento decía: «Estoy frustrado. Esta política económica nos afecta terriblemente, pero al Gobierno no le interesa que la industria produzca. Capaz tienen problemas más graves que resolver». Aseguraba que se sentía solo y no apoyado. A los pocos meses, remata todo y vende su marca.