Un zoom con Pedro Saborido: “Cada uno debe transformarse en un medio de comunicación”
En estos tiempos pandémicos, covidosos e internéticos, en los que circula tanta información se hace necesario encontrar voces autorizadas para pensar y poder abordar esta realidad más que compleja. Una de esas voces es la de Pedro Saborido, quien por estos días viene tirando puntas posibles para pensar algunas de las complejidades que nos atraviesan.
Por Alma Rodríguez
Es un domingo invernal y, a la hora en que el sol cae, logramos que Pedro se hiciera un rato para dialogar acerca de las vicisitudes de este momento histórico y de cómo anda circulando la información por estos tiempos difíciles.
A partir de un relato por el cual le comento a Pedro que una vecina fue a visitar a un matrimonio de ancianos que vive en frente de su casa y que estaban enfermos creyendo que era gripe (y era COVID), surgen algunos temas para pensar. Aquí la cuestión:
Infobaires24: ¿Cómo hacer para cambiar de pronto costumbres que están tan arraigadas como ésta que todavía sobrevive en los barrios de irse a visitar unos a otros en situaciones como las enfermedades o los cumpleaños?
Pedro Saborido: En estos casos, se pone en juego el romanticismo de la tradición y el deber ser contra la racionalidad. No deja de tener la misma raíz de heroicidad el ir a un cumpleaños e ir a visitar a alguien. Tiene que ver con el arrojo y con la nobleza.
IB24: ¿Hay algo de ignorancia ahí también, no te parece?
PS: Por ahí tiene la raíz de heroicidad. Esa cosa de «¿cómo no voy a hacer eso?” El honor para ellos pasa por ir al cumpleaños. Y está relacionado con uno de los problemas que tiene esto que son los protocolos del final de la vida de la gente, no poder estar cerca, es un espanto, están pensando en buscar un protocolo para eso, para las ultimas horas. Gente que interna a sus abuelos o a sus viejos y una vez que lo internaron no lo ven más. Los ven recuperados o muertos. Estos niveles de racionalidad relacionados con la preservación tienen esos lados crueles, no sólo el entendimiento del que no va a ir sino el entendimiento del que está enfermo.
IB24: También hay algo de las costumbres que están tan arraigadas y naturalizadas como ir al baño o tomar agua, cómo no ir a visitar a la vecina que está enferma o a la vecina que cumple años y la voy a saludar hace años, ¿no?
PS: Lo que trae la pandemia es que esos cambios que se van dando con el tiempo y son imperceptibles en un montón de cosas y lo fuerte es que lo tengas que hacer de un día para el otro. Por ejemplo, ¿podemos aceptar la diversidad sexual? Sí. De a poco podemos aceptarla, vamos entendiéndola pero si un día se pueden casar o pueden adoptar hijos ya son como uauuuu… En ese mismo sentido, no era lo natural dejar de visitar a alguien, está mal dejar de visitar al alguien.
IB24: Hay algo de “eso nunca me va a pasar a mí” y de pronto sí te pasa, te puede pasar a vos, a mí, a cualquiera…
PS: Nosotros seguimos viviendo naturalmente porque el que se muere es otro, sino ni estaríamos haciendo esta conversación. ¿Cabe la posibilidad de que alguno de los dos muera dentro de veinte minutos? Por supuesto. ¿Y qué estamos haciendo? Teniendo una conversación. Ajá. Bueno. La construcción de nuestras costumbres está.
Uno maneja seis variables dentro de un carril que te armaste: vas a la facultad, vas a lo de tus viejos, vas a comprar comida. Y eso te da una fantasía de estar manejando tu vida. En realidad lo que tenés es una seguridad de que vayan más o menos bien las cosas pero lo impredecible lo tenés desde que se caiga un helicóptero en tu baño hasta que aparezca una pandemia. El tema es que esos cambios brutales se ven en una persona y de vez en cuando.
Es interesante la discusión que se armó en torno a Coco Silly. Él hace un relato de lo que va hablando con las enfermeras y los enfermeros del lugar en el que está internado y lo que ve en televisión con la gente protestando en el obelisco. Entonces Juan Acosta le contesta algo así como “espero que te mejores pero entendé la libertad, mucha gente prefiere morir a que le quiten la libertad”. Entonces vos ahí ves que hay alguien que ocupa un lugar preestablecido en el relato de lo que ocurre. Siempre va a haber alguien que se opone, siempre va a haber alguien que niegue, siempre va a haber alguien que arriesgue. Siempre va a haber alguien que ante la circunstancia tome el camino de la inocencia.
IB24: Me preocupa la manera en que circula la información para mucha gente y cómo circula y se recibe esa información…
PS: Esos son los límites del Estado de Derecho. Esto va a suceder siempre. Yo entiendo que la comunicación puede terminar siendo confusa, pero es parte de la construcción que tenemos que haya comunicadores que le meten en la cabeza a la gente determinadas cosas. No es lo que el comunicador le mete en la cabeza a esas personas sino cómo se encuentran las personas con ese comunicador que quieren que le diga esas cosas, que le confirmen lo que ya viene pensando de antes.
La gente se identifica cuando le sintetizan lo que piensa en pocas frases, y pasa con muchos de esos comunicadores que logran hacerlo
IB24: Durante el último anuncio de la extensión del aislamiento, Axel Kicillof dio uno de los discursos para mí más potentes y más clarificadores al decir que cuando la economía cae en otros países es culpa de la pandemia y cuando cae acá es culpa de la cuarentena, y que eso “se nota mucho”, aludiendo al poder que tienen ciertos medios hegemónicos para transmitir información. La pregunta es, ¿cómo hacer para que eso que dijo Axel sea escuchado y tomado en cuenta por aquel o aquella que se resiste escuchar a Kicillof porque junto con esa voz escucha a Cristina también?
PS: Es que no tienen que escuchar a Kicillof, te tienen que escuchar a vos como comunicadora. Ese es el tema de cómo tratamos de permear y no dejar que arbitren todo los medios y que eso tiene que ver con recuperar la comunicación propia, que cada uno sea un medio de comunicación. Cada uno debe transformarse en un medio de comunicación. Cómo ser efectivos al momento de comunicar porque si no, no queda otra cosa que indignarnos. La gente se identifica cuando le sintetizan lo que piensa en pocas frases, y pasa con muchos de esos comunicadores que logran hacerlo. Si no, no existiría más la derecha con su propia evolución del pensamiento. Está claro que hay quienes son más proclives a ser de derecha y quienes no, por la experiencia que se ha tenido en la vida, por la formación, por la propia historia. Hay un mercado previo a los Feinmans dispuesto a quien lo sintetice. Y esa raíz muchas veces son las propias contradicciones o efectos no deseados de un montón de cosas que consideramos buenas y por las cuales hemos luchado.
La libertad de expresión tiene estos efectos colaterales. La libertad de opinión también; no podemos diferenciar dónde hay un opinión calificada para algo y dónde no. El territorio de la opinión calificada está en baja, así como hubo en la dictadura un cercenamiento de la posibilidad para expresarse, ahora se rompió el dique y cada uno expresa lo que se le canta todo el tiempo. Incluso como vos decías en una nota cuando hablabas de un cuestionamiento a cualquier tipo que tiene un saber desde un lugar que es tu propio derecho a opinar. Resulta que la profesión del médico es más prestigiosa que cualquier otra profesión pero resulta que cualquier profesión es tan respetable como la del médico. En cuanto a hablar al funcionamiento del riñón, no. De la misma manera, si voy a ir a Donovan y Burelas, en Gerli, y quiero saber cómo llegar, le voy a dar más credibilidad a un tipo que vive en Donovan y Burelas que a uno que vive en Trenque Lauquen. Porque el tipo que vive en Trenque Lauquen no me lo va a poder decir mejor a pesar de que tiene todo el derecho del mundo a decir cómo llegar a Donovan y Burelas.
IB24: Hay algo también de querer en seguida etiquetar y una necesidad de identificar si el otro es peronista o antiperonista, ¿no? Digo, en el caso de las voces autorizadas de la ciencia que conforman el comité de científicos y que por estos días circulan en los medios, hay algo de que si colaborás con las medidas de prevención del gobierno ya sos K, o sos peronista. Se arma un reduccionismo ahí, promovido desde los medios…
PS: Sí, el discurso de grieta, el arte de la confrontación. Nos queda pensar cómo desarmo eso. Cada cosa que hagas va a tener su consecuencia. La democracia tiene estas cosas, convivir con gente que uno piensa que el otro es un imbécil. “El infierno son los otros”, decía Sartre. Esa frase se replica de cinco mil maneras.Y sin embargo en esa contradicción tenemos que convivir.
El territorio de la opinión calificada está en baja
IB24: Algo que está dejando muy en claro todo esto es cómo las clases trabajadoras finalmente son las que ponen los cuerpos, tienen que salir a laburar y están más expuestos.
PS: Sí, totalmente. Ahí es el tema de poder ver algo a lo cual rápidamente te vas a poder acostumbrar. Hay como una apuesta todo el tiempo a que hay aprendizajes. Pero también hay una cosa que es el olvido. Y esto pasa todo el tiempo. Las lecciones que aprendés, hay algo que aprendés y hay algo que se vuelve a repetir. La persona que quiere salir a correr es una persona que no puede aguantar salir a correr. Evidentememte su nivel de control sobre sí mismo es muy bajo, evidentemente no tiene un aparato racional que pueda dominar sus ganas de correr.
IB24: ¿Se emparenta con el “ser porteño” eso?
PS: Acabas de contar el relato de dos que se fueron a visitar y se contagiaron. Se contagiaron gratuitamente. ¿Qué tenías que hacer mejor que salir a correr?¿No podías ver una serie en Netflix? “No, porque mi cuerpo me lo pide.” Y vos, ¿no podías quedarte en tu casa? Le preguntaría a esa gente. Está más cerca de un hábito, más cerca de una máquina. Por mencionar otros ejemplos: el swinger ejerce de una manera ordenada, está tramitada esa pulsión, nadie sufre. Lo racional en esos casos es que nadie sufra. En el caso de la gente que sale a correr o que va a visitar a su vecino enfermo debería ocurrir lo mismo: “No voy a salir a correr para que nadie sufra después”. Entonces, si no podés manejar tu pulsión estás en un problema.
La charla se extiende más allá de la entrevista. Saborido tiene esa capacidad poco frecuente en estos tiempos de tirar una serie de puntas para seguir pensando.