Trabajadores rurales jujeños detenidos en la terminal de Mendoza
Ciento ocho víctimas del abuso institucional no pueden regresar desde Mendoza hacia Jujuy. Maltratados por viñateros cuyanos, abusados por autoridades mendocinas y abandonados por el Gobierno de Jujuy, trabajadores y trabajadoras rurales, discriminados y privados de su libertad, aguardan la intervención de organismos federales para no seguir expuestos al COVID, en una terminal de ómnibus.
Sus propias leyes, sus expulsiones de pobres, trabajadores golondrinas, su custodia permanente al poder de los terratenientes norteños, hacen de Gerardo Morales, un ejemplar del retroceso histórico, democrático, político, social y económico. Todavía no asume la crisis institucional grave que incurre la gestión a su cargo y lo que es peor, al parecer, ha entrado en una psicosis de aislamiento peligroso.
Morales se mira al espejo y considera que es el TRUMP del extremo norte argentino; desconociendo derechos, deberes y garantías fijadas en la Constitución Argentina.
Pero el caso jujeño tiene su correlato en Mendoza, donde la oligarquía viñatera incurre en el delito de privación ilegítima de la libertad, secuestro de personas e insistimos, reducción a la esclavitud de al menos 108 trabajadores y trabajadoras rurales de temporada a quienes no dejan salir de Mendoza, tras haber sido desalojados de las fincas en donde se hallaban cumpliendo con las tareas de la cosecha y luego que dispusieran por el aislamiento social obligatorio, las patronales, expulsarlos de allí, los trabajadores fueron hasta la terminal, compraron sus pasajes con destino de retorno a su Jujuy natal, hecho que no se concretó por dos motivos inocultables: la autoridad del transporte mendocino no los deja salir y la autoridad del transporte jujeño, no les permitirá el ingreso a la provincia con sus familias esperándolos en plena cuarentena.
El pueblo jujeño padece estas confiscaciones atentatorias de la libertad individual que genera un aumento de la incertidumbre y la angustia en el contexto de la pandemia que de por sí, es estresante para cualquier ser humano y resta las medidas de seguridad básica a quienes hoy no pueden llegar a sus viviendas, no poseen las comodidades básicas, no pueden bregar por su salud, higiene personal, ni alimentación. Están 108 argentinos y argentinas, abandonados por los Estados provinciales que determinaron y se arrogaron facultades inexistentes en la autarquía y autonomía de sendos gobiernos provinciales.
Aún los organismos de Derechos Humanos, no se hicieron eco de esta situación que genera graves antecedentes en la insurrección de los estados locales con respecto al Gobierno nacional.
¿Quiénes son los afectados?
Las personas detenidas arbitrariamente por Mendoza y rechazadas por Jujuy, son trabajadores rurales que todos los años por tres meses concurren a las cosechas temporales a desempeñar duras labores del campo.
Viven en las ciudades jujeñas de San Pedro, La Esperanza, Perico, Monterrico, El Carmen, San Salvador, Santa Clara, Fraile Pintado, Palapalá, entre otros parajes.
Para cuando partieron a trabajar no se previa la pandemia que los dejó en esta situación de vulnerabilidad bajo las antojadizas determinaciones de dos dictaduras provinciales.
¿Es facultad de los gobiernos provinciales determinar la circulación en sus territorios?
A esto lo contestó, categóricamente, la Ministra de Seguridad Sabina Frederic, al referirse a la situación acaecida sobre los camiones de carga.
Sabina Frederic, insistió en que “las provincias tienen límites, pero no fronteras”, al referirse a dificultades registradas para la circulación entre jurisdicciones de estos vehículos de transporte con cargas.
Cuánto más podemos suponer que prontamente deberá intervenir la Nación en la retención indebida que comete el gobierno mendocino y la discriminación que arremete el gobierno jujeño poniendo en riesgo la vida de 108 personas en lo que puede convertirse a la larga, en este contexto, en crímenes de lesa humanidad.
Por ahora, se desconoce si el Ministro Mario Meoni está enterado de lo que sucede en ambas provincias con el transporte público de larga distancia y la situación particular de las 108 personas en tránsito en la terminal mendocina.
Aunque a vista clara está que los distritos electorales cambiemitas y sus aliados políticos, parecieran tener un objetivo desestabilizador con sus administraciones y su evidente odio hacia los más vulnerables.
La pandemia expone lo mejor y lo peor de cada uno, sin dudas, la matriz ideológica del conservadurismo brota en cada acto atroz en contra del Pueblo y por ende del Gobierno nacional con su eje humanista, resistido por la oligarquía agroexportadora.
No se comprende, cómo es que al mismo tiempo que Rodolfo Suárez, mandatario mendocino, anunciaba su reunión virtual con el Presidente Alberto Fernández, su secretario de SERVICIOS PÚBLICOS, retenía contra su voluntad a 108 trabajadores temporarios, provenientes de Jujuy.
Estamos conectados vía teleconferencia con el presidente de la Nación, @alferdez, junto al resto de los mandatarios provinciales. Me acompañan el ministro de Hacienda, Lisandro Nieri y la ministra de Salud, Ana María Nadal.
(Sigue) pic.twitter.com/EvHM9oOpEK
— Rodolfo Suarez (@rodysuarez) April 7, 2020