Sin Justicia: aumentaron las resoluciones judiciales a favor de represores
El incremento en el número de prisiones domiciliarias y libertades condicionales concedidas a represores condenados por crímenes de lesa humanidad prendió alarmas en el Gobierno.
Así lo expresó la Secretaria de Derechos Humanos de la Nación luego de que la Justicia en pocos días dejara a las puertas de la libertad a Santiago Riveros y Jorge Tigre Acosta, dos de los genocidas más emblemáticos de la última dictadura, quienes actuaron en los centros clandestinos de detención que funcionaron en Campo de Mayo y en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA).
En los últimos tiempos también fueron beneficiados con domiciliarias otros dos represores: Mario Guillermo Ocampo y Luis Firpo, condenados a perpetua en el juicio de la Contraofensiva.
Preocupación y acción
La @SDHArgentina manifiesta su preocupación por el aumento de las prisiones domiciliarias y libertades condicionales a procesados y condenados por crímenes de lesa humanidad durante el terrorismo de Estado.
— Secretaría DDHH (@SDHArgentina) June 9, 2022
A través de un comunicado, la Secretaría encabezada por Horacio César Pietragalla Corti manifestó su preocupación ante el aumento de las prisiones domiciliarias y libertades condicionales dispuestas por la Justicia Federal en casos de personas procesadas y condenadas por crímenes de lesa humanidad durante el terrorismo de Estado.
“Ante el incremento de estos beneficios se redoblaron los esfuerzos de los equipos de abogados y peritos para analizar cada caso e impedir decisiones arbitrarias por parte del Poder Judicial”.
Y detalla que una «gran mayoría» de los represores detenidos cumplen sus penas bajo el régimen de prisión domiciliaria (565) y que tan sólo 185 cumplen la pena o la prisión preventiva en un establecimiento penitenciario.