El silencio de los cómplices de siempre
El estado de Panamá como gran protector de la élite mundial, y la prensa canalla local como guardiana de los burgueses de siempre.
Diversos artículos de Le Monde, traducidos especialmente para InfoBaires24 por Ana Sosa, dan cuenta de la realidad de los paraísos fiscales descubiertos en la última semana por ICIJ. La complicidad del gobierno de Panamá, a nivel mundial, y de la prensa hegemónica portavoz de los procesos neoliberales en el continente, a nivel local, resultaron claves en el ocultamiento de la red de evasión internacional.
Panamá no respeta los grandes principios internacionales en materia fiscal.
En 2012, el gobierno francés logró un acuerdo con el estado panameño en el que el país del Caribe se comprometía a apoyar la lucha de la Unión Europea contra los paraísos fiscales. De esa manera, Francia quitó de la lista negra de paraísos a Panamá y renovó la confianza mundial.
No obstante, la divulgación de los Panamá Papers y la entramada de evasión mundial y lavado de activos de una elite de ricos, políticos, narcotraficantes y deportistas, entre los que se encuentra vinculados Mauricio Macri y otros funcionarios de Cambiemos, volvió a ubicar a Panamá en la lista negra de Estados y Territorios No Cooperativos en materia fiscal. Como contra respuesta, el ministro de la presidencia de Panamá, Álvaro Alemán, sostuvo que tomarán medidas contra el gobierno de Paris.
En ese marco, el ministro de finanzas francés, Michel Sapin, le confió a Le Monde que “el problema no es que estas sociedades offshore existan, sino que sean utilizadas afín de disimular activos y que Panamá sea cómplice, negándose a dar la identidad de los verdaderos beneficiarios a los Estados que se lo reclaman”. “Panamá quiso hacernos creer que era capaz de respetar los grandes principios internacionales”, abundó.
Así como el gobierno de Panamá encubrió a la red internacional de evasores, Argentina tiene su propia teleraña de ocultamiento que se fomenta desde el silencio cómplice de los medios hegemónicos afines a los procesos conservadores. La tentativa de banalización del macrismo y de los medios que aducen una supuesta “transparencia”, “normalidad” o legalidad del hecho en el que Mauricio Macri se encuentra involucrado, está condenada al fracaso.
En ese sentido, mientras medios como Le Monde impulsaron espacios para informar minuto a minuto las revelaciones y ofrecer a los lectores las respuestas a las inquietudes populares, sorprende el contraste con la lentitud y la escasez, o incluso la omisión de información proporcionada por el diario La Nación – que participó de la investigación al igual que Le Monde- y Canal 13.
Mientras el blindaje mediático se mantiene firme, la Autoridad de Control Prudencial y de Resolución (ACPR), «gendarme de bancos», solicitó a los establecimientos bancarios “un reporting complementario” sobre sus actividades en los países considerados como paraísos fiscales, luego de las revelaciones del Panamá Papers.
Asimismo, la ex jueza del polo financiero francés, Eva Joly lanzó un petitorio en el día de ayer, en el sitio Change.org, solicitando investigar responsables de evasión fiscal a cuestionando los bancos implicados en el escándalo en el que se encuentran involucrados un gran número de actores económicos y dirigentes políticos.
Por su parte, el supervisor del sector británico reaccionó a los Panamá Papers este jueves con un ultimátum dirigido a los bancos británicos. La Financial Conduct Authority (FCA) envió un escrito a los bancos y al conjunto de las instituciones financieras solicitando revelar, de aquí al 15 de abril, sus lazos eventuales con la firma panameña Mossack Fonseca. A su vez, luego de tres días de negación y cuatro comunicados incómodos frente a las acusaciones contenidas en los “Panamá Papers”, el primer ministro británico David Cameron tuvo que hacer marcha atrás. Admitió, en la noche del jueves, que había sacado provecho del trust que su padre, Ian, fallecido en 2010, había gestionado a través del estudio de abogados panameño Mossack Fonseca, sin tributar ningún impuesto durante 30 años.
Las repercusiones internacionales de los Panamá Papers ayudaron a redoblar los esfuerzos en materia de investigación contra los paraísos fiscales, la banca internacional y los líderes políticos involucrados. En nuestro el país, el silencio de la prensa canalla solo busca que Macri vuelva a evadir sus responsabilidades y salga favorecido por el blindaje que le brinda Héctor Magnetto y Bartolomé Mitre.