Se impone el NO a la reelección de Evo
Escrutado el 72,5 por ciento de los votos en el referendo de este domingo, un 56,5% votó a favor del No a habilitar una nueva reelección del presidente Evo Morales, mientras un 43,2 lo hizo a favor del Sí, según informó el Tribunal Supremo Electoral (TSE), tendencia que de mantenerse significaría la primera derrota electoral del mandatario en sus 10 años de gestión.
«Al 72,5 por ciento de los resultados preliminares que tenemos es que el Sí está en un 43,2 por ciento y el No en un 56,5», afirmó la presidenta del TSE, Katia Uriona, a medios locales en la ciudad de Sucre, donde se realiza el escrutinio al ser la capital constitucional del país.
Los sondeos por recuento rápido difundidos la noche del domingo también daban la victoria al No por un estrecho margen, por lo que la oposición boliviana celebró de inmediato este resultado extraoficial.
Sin embargo, el gobierno insistió en que hay un «empate técnico» y pidió esperar a los resultados oficiales.
Varias de las explicaciones recogidas sobre este resultado oficial, ahora de difícil reversión, apuntan no sólo a las denuncias de corrupción difundidas por la prensa boliviana y sus redes sociales, así como a la quema de la alcaldía opositora de la ciudad de El Alto, vecina a La Paz, donde hubo seis muertos, sino también a problemas internos de la fuerza gobernante, el Movimiento al Socialismo (MAS) y sus organizaciones sociales afines.
El pedagogo, ex cura jesuita y ex viceministro de Interior del presidente Morales, Rafael Puente, destacó, en declaraciones a Télam, que «el primer gobierno de Evo (2006-2010) ha sido el mejor de la historia de Bolivia, por lo que se merece volver a las bases» su conductor.
Pero agregó que «los gobiernos que tienen excesivo tiempo en el poder se obnubilan y pierden calidad de gestión».
En ese sentido, y consultado por la posibilidad de un retorno al poder de la derecha boliviana en el 2019, señaló que «esos sectores la tienen difícil, porque desconocen el país», pero sobre todo, dijo, «no la tienen fácil por el recuerdo de la gente de sus gestiones neoliberales anteriores a la de Morales».
Otro dirigente campesino, Román Loayza, fundador de la Confederación de Sindicatos Unidos de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), una entidad afín al gobierno de la que dijo ser aún coordinador, consideró «positivo» este resultado electoral por considerar que el presidente Morales y su vice Alvaro García Linera, se habían distanciado del pueblo.
El gobierno insistió en que hay un «empate técnico» y pidió esperar a los resultados oficiales
Enfatizó que ahora se dedicará, en «estos cuatro años» de mandato que le restan al mandatario, a «trabajar por reorganizar al Instrumento Político (el MAS) desde abajo y hacia arriba», pero no quiso decir si su voto fue por el No o por el Sí.
Un reconocido periodista, que fue secretario de Organización de la Federación de Trabajadores de Prensa, Remberto Cárdenas, aseguró, pero sin querer hacer nombres, que «gente que salió del gobierno, del que eran funcionarios, votaron por el No», porque aspiran a impulsar en el 2019 la candidatura presidencial del actual canciller, de origen indígena, «David Choquehuanca».
Recordó que García Linera formuló recientemente en Uruguay una serie de consejos para evitar la derrota de los gobiernos progresistas de la región, una de las cuales fue la profundización de las medidas de apoyo a los sectores populares, pero opinó que «nada de eso hizo en Bolivia».
Los sondeos de las empresas Equipos Mori e Ipsos difundidos por medios de prensa locales cuatro horas después del cierre de los colegios dieron al No a la reforma constitucional para habilitar un nuevo mandato de Morales y García Linera, un porcentaje del 51 al 52,3 por ciento y al Sí entre un 47,7 y un 49 por ciento.
En ese marco, el presidente Morales pidió a los seguidores del Sí y del No aguardar los resultados oficiales del referendo «con serenidad», y aseguró que con cualquier resultado el proceso de cambio en Bolivia continúa.
«Nosotros respetamos los resultados y vamos a respetar los resultados, sea No o Sí siempre vamos a respetar», aseguró
De este modo respondía también a alguna manifestaciones callejeras que festejaban el triunfo del No en la ciudad de La Paz, según dijeron varios de los entrevistados por esta agencia.
Por su parte, la misión de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Bolivia, dijo que detectó algunas irregularidades en el desarrollo del referendo, pero descartó que puedan considerarse pruebas de fraude electoral.
El jefe de la delegación y ex presidente de la República Dominicana, Leonel Fernández, consideró durante la presentación del informe preliminar de la misión que para que las irregularidades se califiquen como fraude, ello «requiere una intención maligna, un propósito malsano para producir la alteración de los resultados».
«Podemos ver irregularidades, podemos ver faltas, podemos ver fallas, pero no estamos hablando de fraude deliberado que tenga como objetivo adulterar los resultados», aseveró.
La misión de la OEA recibió algunas denuncias de irregularidades, relacionadas sobre todo con la falta de actas en los materiales proporcionados en algunas mesas del departamento de Santa Cruz, que se resolvieron retrasando el cierre de urnas y, en el caso de dos colegios, aplazando la votación al 6 de marzo.
Representantes de la misión, que contó con 63 observadores y examinó 450 recintos de votación, permanecerá en el país hasta que se publique el resultado oficial.