Salta: Recuerdan a las víctimas de la Masacre de Palomitas
Organizaciones de DDHH repudian la política de represión ordenada por el Ministro Pulleiro
Los familiares, amigos y organizaciones de Derechos Humanos en Salta, emitieron un comunicado en el que criticaron fuertemente al Gobierno provincial, sobre el cual dijeron: «En Salta, a partir de la asunción del gobernador Saénz se han profundizado los problemas económicos y sociales y se ha consolidado una política represiva de violencia institucional y policial»
Las organizaciones insistieron: «El nombramiento como Ministro de Seguridad de Juan Manuel Pulleiro, un militar negacionista, el DNU 255 (ahora convertido en ley por la inacción interesada del Poder Legislativo) que otorga facultades excepcionales a la policía, los abusos y torturas en dependencias policiales y en los traslados de detenidos, los allanamientos de domicilios sin orden judicial, el gatillo fácil y las lesiones gravísimas ocasionadas a detenidos, la represión a comunidades originarias, a movilizaciones en reclamo de derechos, a los asentados que piden techo, a migrantes y trabajadores informales, configuran una situación de clara violación a los Derechos Humanos, a las normas constitucionales y a los tratados internacionales suscriptos por nuestro país»
Cómo sucedió la Masacre en Palomitas, Salta
El 6 de julio de 1976 más o menos a las 20:30hs., se presentó el militar Hugo Cesar Espeche y retiró del pabellón de mujeres a Celia Leonard de Avila que tenía una beba, Marcela, de cuatro meses y medio, y le estaba dando de mamar. Después nombran a Evangelina Botta de Nicolay y las esposan juntas, luego, llaman a Georgina Dros, quien se saca los lentes de contacto y se pone sus lentes comunes.
Entonces suena el nombre de Amaru Luque de Usinger y por último el de Maria del Carmen Alonso de Fernández (sobrina del ex gobernador Ragone). Mientras tanto, en el pabellón de varones sacan a: Benjamín Ávila, Pablo Outes, Roberto Oglietti, Alberto Savransky, José Póvolo y Rodolfo Usinger que empieza a gritarles ¡Asesinos, hijos de mil putas!
La masacre fue una operación conjunta donde participaron fuerzas dirigidas por los militares que fueron los ejecutores directos de la muerte de esos patriotas. También, participaron policía federal, policía provincial, guardia cárceles y Tránsito.
Carmen Leonard de Alarcón se presenta en el ejército para pedir certificado de defunción de su hermana Celia y su cuñado Benjamín y le dan un certificado con el nombre de su hermana Nora que se encontraba detenida en el penal de Villa Las Rosas. https://open.spotify.com/episode/746rtkwFcK4obRcINIkjjh?si=ubDYL7YTTo6yZQqEiqYZyw
La causa tuvo tres partes Palomitas I, II y III. Fue recién en diciembre del 2010 cuando la Cámara Federal de Salta ratificó la condena a los militares Carlos Alberto Mulhall, Miguel Raúl Gentil y Hugo César Espeche a quienes condenó a reclusión perpetua e inhabilitación absoluta.
En Palomitas II fueron condenados los militares Luciano Benjamín Menéndez a reclusión perpetua e inhabilitación absoluta, el policía Joaquín Guil a reclusión perpetua e inhabilitación absoluta y el guardia cárcel Juan Carlos Alzugaray a 20 años de prisión e inhabilitación absoluta.
En Palomitas III el juez federal Julio Leonardo Bavio ordena la prisión preventiva del guardia cárcel Víctor Manuel Rodríguez debiendo continuar en libertad hasta la etapa del plenario. Además, decide el sobreseimiento provisional del militar Luis Dubois y cita al guardia cárcel Vicente Agustín Puppi a presentar declaración indagatoria.
Posteriormente, en el 2019 el ex juez Ricardo Lona fue juzgado por esta causa por la cual cumple prisión domiciliaria y se encuentra apelada en la Corte Suprema. https://infobaires24.com.ar/salta-sentencian-al-ex-juez-de-la-dictadura-ricardo-lona/
El Dr. David Leiva que trabajó la causa «Palomitas» dice en su alegato final: “Las víctimas fueron asesinadas por luchar por la distribución de la riqueza y creo que esto resume los profundos ideales que los llevaron a elegir la militancia.”
«Los compañeros Celia Leonard de Avila, Evangelina Botta de Nicolay, Georgina Dross, Amarú Luque de Usinger y María del Carmen Alonso de Fernández y los compañeros Benjamín Avila, Pablo Outes, Alberto Savransky, Roberto Oglietti, José Póvolo y Rodolfo Usinger cuyas vidas les fueran arrebatada en la masacre de Palomitas, son esos muertos que nunca mueren porque viven en las calles que llevan su nombre, en las canciones, en los poemas, pero sobre todo viven en cada compañero que lucha por la justicia, como ellos lo hicieron, dejando sus comodidades
para que un mundo nuevo floreciera donde los derechos de todas y todos sean respetados» concluyó el mensaje de este acto realizado hoy en la provincia de Salta.
