Con un paso importante y confuso, se abrió la agenda política de Salta cuando en plena conferencia de prensa, el hasta entonces Jefe de Gabinete, Fernando Yarade, en presencia del Gobernador y candidato a vicepresidente, Juan Urtubey; dijo que renunciaba al cargo como coordinador de los Ministerios.
La incomodidad en el rostro de Urtubey era manifiesta y aunque trató de disimular el momento, no pudo más que caer en lugares y excusas comunes, luego que públicamente, su supesto perfil al reemplazo provincial, Fernando Yarade, hiciera pública su honda molestia por haber sido espiado e intimidado por un aparato como el dron, que circunavegó el espacio aéreo de su vivienda familiar en horas de la noche del lunes 24 de junio. “A partir de mañana me van a ver en la actividad privada” dijo y se refirió a lo que pasó en su casa.
Lo anticipó en el Facebook
Yarade había publicado en su perfil social “Ayer a la noche, mientras mi mujer y yo trabajábamos un dron sobrevoló mi casa. Mis dos pequeñas hijas estaban en casa con un mayor a cargo. Por supuesto se asustaron (…) El posteo, además amplificó las intenciones manifiestas para irse, hoy, del modo que lo hizo: “Desde que volví a la función pública sufrí algún que otro ataque. Le resté importancia. Pero no voy a tolerar que se metan con mis hijas ni con mi familia. Es lo más sagrado y lo que más amo en el mundo. Quiero profundamente a nuestra Provincia y como en el 2001 estoy nuevamente ayudando para salir adelante. No voy a aflojar» acotó en su muro de Facebook.
Renunció por gente mala y sucia
Mientras esgrimía sus argumentos ante la prensa local y luego que explicara sobre un proyecto minero, declaró: “Hay mucha gente buena que me ha acompañado y mucha gente mala… mucha gente sucia. Y bueno, este es mi último día de trabajo” expresó un incómodo Fernando Yarade, el perfil que la banca financiera trató de imponer a Urtubey para asegurarse el pago de deudas contraídas primero y en estos dos últimos años, como posible sucesor provincial.
Trascendió además que el renunciado, hace dos semanas habría enviado mensajes a la dirigencia opositora para ser considerado en algún cargo nacional, lo que no sucedió.
En cuanto al reemplazo en la Jefatura de Gabinete, en comunicación de Gobierno, se anticipó que Baltasar Saravia será el nuevo coordinador de los ministerios del gobierno. El gobernador, Juan Manuel Urtubey, tomará juramento como jefe de Gabinete de Ministros a Saravia, el próximo jueves al mediodía.
Una conferencia con extraña portavoz
Al promediar la tarde del martes la prensa había sido citada, al salón del Hotel Alejandro I. En la oportunidad la senadora nacional por PARES, Cristina Fiore, quien asumió el rol de voz oficial, esgrimió una serie de argumentos que rondaban lo coloquial, en un asunto tan grave como el espionaje, admitido por ella sobre lo que le sucedió al saliente cuadro urtubeicista, Yarade y los micrófonos hallados en el despacho oficial de otro funcionario; Emiliano Estrada.
«Primero quiero contar como se gestó esta convocatoria a los amigos de la prensa, gracias por estar, tiene que ver con los hechos, me parece, de público conocimiento, cuando Fernando Yarade anunció hoy sorpresivamente, diría, hoy su renuncia, a la jefatura de gabinete, empezarona sonar los teléfonos de todos nosotros y nos llamó mucho la atención, quiénes llamaban que son muchos de los que están acá presentes» dijo al iniciar su soliloquio, Fiore.
Luego agregó «Gente que está vinculada con el ámbito de la minería, con el ámbito de la construcción, con el comercio, con la industria, el campo. No fue casualidad porque en definitiva, son sectores con los cuales Fernando viene trabajando, de hace muchísimo tiempo, por eso les queríamos agradecer la idea de decir que más allá que circunstancialmente yo haya tomado la palabra, somos un conjunto de gente que se ha reunido hoy con una sola finalidad, capaz que con dos, la primera es solidarizarnos en nombre de todos, de las fuerzas vivas de la sociedad civil y también del ámbito de la política; solidarizarnos con Fernando Yarade y su familia porque de un tiempo a esta parte han sido injustamente víctimas, de una serie de amenazas, que lo que han hecho es que toda una familia la pase muy mal.
La segunda razón por la que también estábamos acá es porque en realidad me gustaría que reflexionemos juntos sobre el hecho que no se puede naturalizar que estas actitudes cobardes y mafiosas, puedan darse en nuestra provincia. Y digo que no se puede naturalizar porque es espantoso, el mensaje que le estamos dando a la comunidad, no puede ser porque alguien se arriesgue a ser funcionario público o de repente, al decir que tiene vocación para gobernar la Provincia, tenga que someter nada más y nada menos que a su familia, a pasar por lo que la familia de Fernando Yarade»
Entre ironías desacertadas y un parlamento al estilo maestra ciruela, Cristina Fiore, dijo: «Muchos de uds. saben y otros no, pero cuando Fernando se incorporó como Jefe de Gabinete, inauguró un mensajito de whatsapp, donde literalmente se lo amenazaba de muerte. Nada más y nada menos que a él y a sus mellizas, esa gente valiente que anda dando vueltas por ahí, que es incapaz de dar cualquier debate en el ámbito de las palabras, prefiere el ardid de un mensaje de texto cobarde y sin ningún autor y sin dar la cara.
Fue transcurriendo el tiempo y sin demasiadas novedades y cuando Fernando anunció su candidatura a gobernador, empezaron unas que otras cosas que quizás cometimos el error en decirles picardías, de quizás eso habrá que investigarlo, de la vieja política»
«El punto final de esto fue cuando una de las hijitas de Fernando dormía tranquilamente y se despierta por un ruido y con el celular que tiene al lado, logra filmar nada más y nada menos que un dron filmando. Uno dice ¿filmando para qué? y las respuestas que pueden dar es una peor que otra, yo no me animo a arriesgar absolutamente ninguna respuesta de por qué un dron está en la propiedad privada, a las diez media, once de la noche porque la verdad que…no lo sé, lo que sí sé que eso verdaderamente está mal» acotó y para rematarla, expresó: «Me parece como sociedad civil y como políticos, debemos decir todos; basta»