Este es el primer informe sobre la situación social y hospitalaria que presentará Infobaires24 a sus lectores. Basado en hechos recientes y en testimonios de los pobladores norteños, se trata de acercar al país la situación de abandono, pobreza y miseria que aqueja a la región limítrofe en la provincia de Salta.Un médico tartagalense, apellidado Céspedes, descendió de su camioneta Hilux para amenazar a los manifestantes de Pueblos Originarios que reclamaban por la mala atención hospitalaria y el constante maltrato que sufren en ese nosocomio.
Fueron 43 los caciques quienes en esta semana cortaron la ruta 34 en el acceso a Tartagal para denunciar públicamente por el estado del hospital regional y también el del departamento Rivadavia, en Santa Victoria Este que se encuentra en total estado de abandono, sin personal de limpieza y en completo hacinamiento de sus pacientes.
Los salteños de pueblos originariones insisten en reclamar por ser víctima de actos discriminatorios y consideran que la alta mortandad infantil de sus hijos, se debe a que la atención médico se basa en no atender o esforzarse por los bebés, niños, niñas y adolescentes que se encuentran en peor estado de salud, yaciendo ante los graves estado de desnutrición en los que se encuentran, la mayoría de los pobladores en el área de frontera.
El cacique Modesto Rojas, fue quien hizo declaraciones a la prensa tartagalense y comentó sobre lo sucedido en el corte de ruta el día 4 de marzo.
«El doctor trató con malas palabras diciendo matacos de mierda y luego dijo «yo a los matacos que van al hospital yo los mato y nadie sabe y los matacos los mato como perros, no valen nada yo así les voy a terminar matar a todos yo no los quiero los matacos son sucios».
Luego los caciques le reclamaron de esta manera, un referente dijo «usted es el asesino que mata a nuestros hermanos» y vino un gendarme y lo empujó. Un cacique Hector Sánchez casi se cayó, ese gendarme lo apoyó al doctor.
Así nos discriminan como pueblos originarios que hoy sólo buscamos fuentes de trabajos para nuestros gentes, no queremos bolsones, sólo queremos proyectos y fuentes de trabajos» declaró Modesto Rojas.
Acción del INADI, Salta
A la par de este suceso, trascendió en la prensa local, la denuncia penal que el INADI -delegación Salta- realizara al Hospital Juan D Perón de la ciudad norteña de Tartagal, departamento San Martín, provincia de Salta. Conforme lo comunicado por el organismo: «el Instituto Nacional Contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo, se trasladó al Hospital San Bernardo para recibir formalmente la denuncia de una mujer Wichí, contra el Hospital Juan Domingo Perón de la localidad de Tartagal.
El día 18 de febrero el INADI Delegación salta, tomó conocimiento de la grave situación de salud de una mujer de 32 años de la Comunidad Wichí y madre de cuatro hijos.
(imagen del archivo ENASHU 2013)
La mujer se encuentra internada en el Hospital San Bernardo de la Ciudad de Salta, con un cuadro oncológico avanzado. Según se pudo recabar, la paciente tuvo una cirugía oncológica en el año 2018 en el Hospital Juan Domingo Perón de la localidad de Tartagal, sin metástasis al momento de la cirugía pero posterior a ese hecho no se le realizó un seguimiento garantizándole un diagnóstico y tratamiento, encontrándose a la actualidad con una metástasis del cáncer avanzada y considera haber recibido una atención discriminatoria, indigna y negligente.
Frente a la delicada situación de salud de la mujer y ante la posibilidad de haber podido evitarse el avance del cuadro oncológico con una adecuada intervención y frente a la posibilidad de que se haya cometido un delito por mala praxis o negligencia contra la paciente por parte de médicos del Hospital de Tartagal, en cumplimiento con nuestro deber de funcionarios públicos, iniciamos la denuncia penal en la Ciudad Judicial, para que se investigue y se tomen medidas al respecto.
Del mismo modo pusimos en conocimiento la situación de la paciente a las autoridades del Ministerio de Salud de la provincia, a la Secretaría de Asuntos Indígenas del Ministerio de Desarrollo Social, a la Secretaría de Derechos Humanos del Ministerio de Gobierno de la Provincia de Salta y al Observatorio de Violencia Contra la Mujer, para poder avanzar en gestiones que permitan garantizar sus derechos.
El delegado del organismo nacional, Gustavo Farquharson, sostuvo que “se deben humanizar los servicios de salud de toda la provincia” y reconoció que “existe un problema grave de acceso y atención sociosanitaria hacia los sectores más vulnerados de Salta”.
Hospitales en condiciones inhumanas
Fuentes consultadas por Infobaires24, las que se mantienen en reservas por cuestiones de precaución, comentaron que Tartagal tiene una situación grave en el sentido del maltrato evidente hacia las comunidades originarias, pero que el estado hospitalario en el área de la frontera, por ejemplo en SVE es aún peor, no sólo por la desidia que existe en su contra sino por la falta de higiene del lugar, de donde la mayoría de las personas atendidas por distintas patologías -en su inmensa mayoría, relacionadas con la pobreza- deterioran su estado de salud, porque la limpieza del hospital es inexistente.
«Nos dejan morir, a los niños que están más bajo de peso si se complica la enfermedad no los salvan» comenta un padre wichí que está cuidando a una niña internada por diarreas y vómitos. «Si alguno mejora, nos mandan a nuestra casa pero no nos pueden dar leche que necesitan los bebés desnutridos porque no tienen provisión, pero sabemos que ellos no la usan con los wichís» agrega el dolido progenitor.
Las partidas de leche que debiera reponer la Provincia, no están en los nosocomios, tampoco muchos de los insumos, incluyendo aquellos indispensables para atender a quienes cursan una desnutrición grave.
«Hacemos lo que podemos, no tenemos la cantidad suficiente de insumos hospitalarios, no tenemos ordenanzas que limpien el hospital. Los baños siempre están sucios, como las salas de internación y es cierto, las enfermedades por virus interhospitalarios, se han cobrados muchas víctimas que estuvieron internadas por otros cuadros clínicos. Los pobladores originarios no mienten cuando dicen del abandono, tanto en Tartagal y más en Santa Victoria Este. Pero al estar tan lejos de la capital, nadie se entera de esto que sí es conocido por la Ministra de Salud que vino hasta aquí, le dijo a sus asesores que anoten todo, pero no hizo nada. A nadie le importan las muertes en la zona rural» nos comentó una persona vinculada al nosocomio local.
Falta leche, inyectables, personal bilingûe especializado en emergencias, aumenta progresivamente la desnutrición, hasta el 27 de febrero en Santa Victoria, hubo diez casos de niños desnutridos, 6 en estado grave y 4 moderado.
Los niños y las niñas que pueden llegar a recuperarse cuando vuelven a sus casas, empeoran porque no tienen acceso a la alimentación necesaria. Se precisa personal capacitado en el contexto indígena. A la fecha los internados están en una misma habitación y aparejado a la falta de limpieza, los contagios son habituales.
