Rusconi: «Hay personas que siguen presas por el montaje de causas»

El ex fiscal de la Procuración General de la Nación, Maximiliano Rusconi, se refirió a la participación del abogado Pablo Lanusse en el equipo judicial que asesora al ex presidente Mauricio Macri en las causas por maniobras de espionaje ilegal sobre políticos opositores, oficialistas y periodistas. Analizó también el modus operandi de la gestión macrista en materia judicial y trazó algunos lineamientos para la futura Reforma Judicial. «No podemos olvidarnos que gracias a esta violación de reglas sistemática hay personas que todavía hoy siguen presas por el montaje de causas», afirmó.

En diálogo con Fernando Alonso en el programa Reporta Caput, Rusconi sostuvo que las cosas que dice Lanusse lo sorprenden parcialmente. «La sorpresa está vinculada con que hace décadas, yo conocí a un Lanusse con cierta valentía para investigar algunas mafias delictivas, con una tendencia al show off un poco subrayada. Pero la verdad es que desde ese momento hasta ahora no ha dejado de descender en el modo en que ejerce la profesión. Es un mal ejemplo, es una lástima. Pero tampoco me sorprende que el abogado que utilizó la representación de la familia Nisman para erosionar al gobierno de Cristina, y para vincularse al gobierno de Macri sea hoy el abogado de Macri. Me parece que le están pagando algunos favores», señaló.

Rusconi advirtió de todos modos que «el problema acá no es Lanusse. Lanusse es alguien con cierta mediocridad. El problema pasa por un Estado que por cuatro años decidió de modo contundente seguir con la tendencia que tenía el primer mandatario. No nos olvidemos que Macri asumió procesado por el mismo problema, por esta devoción que tiene, casi sexual, por escuchar los teléfonos y conocer la intimidad de todo el mundo. Porque ni siquiera uno puede concentrarse solo en los opositores ideológicos, hasta a los propios investiga. Nadie le dijo al ingeniero, o pseudoingeniero, que en la Argentina no se puede hacer inteligencia interna», remarcó.

«Es tan grave lo que ha pasado que me parece que está bien encarado por el actual presidente. Hay que conocer bien todo lo que pasó. Las dos funcionarias que están designadas, tanto Cristina Caamaño en la AFI, como María Laura Garrigós en la intervención del Servicio Penitenciario Federal, son dos personas de enorme honestidad y valentía, lo cual va a colaborar mucho en saber qué pasó», resaltó.

«Tenemos que desarrollar a partir de ahí un conjunto de políticas públicas muy integrales para que esto no suceda nunca más»

El abogado sostuvo que «no podemos olvidarnos que gracias a esta violación de reglas sistemática hay personas que todavía hoy siguen presas por el montaje de causas. El gobierno de Macri no hizo solo esto. Con un conjunto de jueces –algunos muy vinculados, otros con cierta debilidad-, y algunos fiscales, han desarrollado y multiplicado causas hasta el infinito con el mismo objeto. Han condicionado a los peritos para que digan lo que tenían que decir según lo que le mandara a decir la diputada Carrió o Patricia Bullrich. Hubo detenciones que fueron directamente operaciones de inteligencia. No nos olvidemos que la detención de Lázaro Báez fue una operación de Patricia Bullrich, junto con un juez que hoy sería, para algún desprevenido, considerado un amigo, porque no es Bonadio. La detención de Lázaro Báez fue un engaño total», afirmó.

«Nos escucharon las conversaciones a los abogados defensores. Yo desarrollaba estrategias, charlaba sobre cómo defendernos, con qué argumentos, lo que uno como abogado hace siempre, cómo convencemos al tribunal de que somos inocentes, y esa conversación estaba siendo escuchada por fiscales, por jueces, por la AFI, por el presidente», detalló. «En esas condiciones, todo lo que ha sucedido ahora, tiene que ser reparado».

«La culpa de que estas causas no lleguen al descubrimiento de la verdad la tienen los jueces, los fiscales, y un gobierno que fue altamente deshonesto en esto».

Por otra parte, Rusconi se refirió al discurso de Alberto Fernández ante la Asamblea Legislativa. «Fue emocionante el tema de la Justicia. Estos temas han sido uno de los grandes ejes de su discurso», aseguró.

En referencia a las posibilidades de encarar con éxito una Reforma Judicial, señaló: «A mí me gustaría con todo cariño, respeto y humildad decirle al presidente que se deje ayudar. Pensar que la Reforma Judicial se va a hacer porque en vez de doce jueces federales vamos a tener veinticuatro es ridículo, no pasa por ahí totalmente. Pensar que se puede seguir funcionando con esta Corte cómplice… ¿quién va a ser el garante de que la Reforma funcione? ¿Lorenzetti? A veces hay que hacer nombres propios, porque no son anónimos. Son sujetos que han jugado un partido. Cualquier técnico, si el 3 no pudo marcar al 7 en todo el primer tiempo, ponerlo a jugar de puntero y que desborde no puede ser una salida. Ni Lorenzetti ni los cuatro que lo acompañan», consideró.

«Hay que reformar la Corte, hay que reformar el sistema de asignación de casos, los modelos de capacitación, los modelos de selección de magistrados. El Consejo de la Magistratura ha sido vergonzoso como ha seleccionado jueces».

Asimismo, remarcó que «en la Argentina hay enormes juristas, sanos, como Zaffaroni y Julio Maier, y hay gente más joven que puede acompañarlos. Ellos son sujetos que garantizan la gran tendencia hacia donde vamos», indicó.

«También convocaría a un conjunto de juristas para que hagan una auditoría de los casos que han sucedido estos años, para que no se crea que somos los abogados de De Vido, de Lázaro Báez, de Cristina los que decimos estas cosas. Con solo analizar el estándar del sistema internacional de protección de los derechos humanos alcanza para saber que todo lo que ha pasado acá es todo nulo, ha sido todo un desastre», afirmó.

«Hay mucha gente expectante de lo que haga el Presidente, pero también miremos que hay que ayudarlo», concluyó.