Panorama de las Intendencias en Buenos Aires
El Frente para la Victoria obtuvo 19 intendencias, Cambiemos, once y UNA, tres. Candidatos de La Cámpora y otras agrupaciones K desplazaron a barones del PJ.
El conurbano mantuvo su mayoría peronista, aunque Cambiemos sumó a los municipios que ya gobernaba intendencias como Morón, Tres de Febrero, Quilmes y Pilar. En buena parte de estos distritos, los candidatos macristas recibieron votos de UNA. El Gran Buenos Aires seguirá teniendo una amplia mayoría de intendentes del Frente para la Victoria, pero con jóvenes kirchneristas reemplazando a dirigentes del PJ tradicional. En por lo menos cuatro intendencias, candidatos de La Cámpora y otras agrupaciones K desplazaron a barones del PJ que parecían inamovibles.
En Merlo gobernará Gustavo Menéndez (FpV), el candidato que derrotó a Otacehé en la interna. En Moreno asumirá el lugar de West el postulante de La Cámpora Walter Festa . Otro joven K, Juan Zabaleta, sacó de Hurlingham a Luis Acuña, otro de los caciques que se fueron con Sergio Massa . Zabaleta es concejal del FpV y le cortó a Acuña el intento de un cuarto mandato.
Mariano Cascallares, que le ganó en la interna del FpV a Darío Giustozzi se consagró al frente de Almirante Brown. Cascallares es sciolista, pero de buena sintonía con La Cámpora. De hecho, llevó como primer candidato a concejal a José Lepere, de la agrupación K.
En La Matanza, Fernando Espinoza le pasará el bastón de mando a Verónica Magario, que será la primer intendenta mujer en la historia del distrito. Diputada nacional del FpV, de 46 años, es hija de Raúl Magario que en los 70 fue miembro de la conducción de Montoneros. La jefa comunal electa fue subsecretaria de Desarrollo Social, vicejefa de Gabinete y concejala del partido más populoso del Gran Buenos Aires.
El PRO retuvo los distritos de zona norte que ya gobernaba, como es el caso de San Isidro, intendencia que Gustavo Posse gobernará por un quinto período; y de Vicente López, donde Jorge Macri fue también reelecto. Pero además sumó intendencias en las que no esperaba ganar.
En Quilmes, Martiniano Molina se impuso sobre Francisco “Barba” Gutiérrez. En las primarias, el cocinero y su rival del FpV habían quedado a muy poca distancia.
En Tres de Febrero, Cambiemos le ganó la intendencia a Hugo Curto, otro histórico jefe territorial del Oeste, que dejará la intendencia después de gobernar el distrito por 24 años. El candidato PRO Diego Valenzuela, que había sido una de las sorpresas macristas de las PASO al quedar a menos de cuatro mil votos de Curto, consiguió descontar la ventaja. Fue uno de los distritos donde el massismo acordó aportar sus votos a Cambiemos después de las PASO.
En el municipio de Morón, Ramiro Tagliaferro (Cambiemos), el marido de María Eugenia Vidal, superó a Hernán Sabatella (FpV-Nuevo Encuentro) por diez puntos, 42 a 32 por ciento.
Otro distrito que el oficialismo perdió a manos del PRO fue Pilar, donde el intendente saliente Humberto Zúccaro fue uno de los primeros en reconocer la derrota a manos de Nicolás Ducote, por seis puntos de diferencia, “39 a 33 por ciento aproximadamente”.
El Frente para la Victoria mantuvo Avellaneda, que seguirá gobernada por el cristinista Jorge Ferraresi. Así, sumará cuatro años a los ocho que está por cumplir en el distrito del sur del conurbano, tras ganarle a la postulante de Cambiemos Gladys González.
También Patricio Mussi ganó en Berazategui por un amplio margen. Y en José C. Paz, el Japonés Mario Ishii hizo un regreso triunfal, casi 25 puntos arriba de su rival de Cambiemos.
Otro candidato que sacó una ventaja de veinte puntos sobre el segundo, 47 a 27 por ciento, fue Martín Insaurralde en Lomas de Zamora, que se resarció de la paliza recibida en el 2013.
En el listado de intendencias donde el oficialismo ratificó su poder están además Florencio Varela –Julio Pereyra ganó su séptima elección consecutiva–, Esteban Echeverría –un nuevo mandato para Fernando Gray–. En Ezeiza, Alejandro Granados quedó habilitado para volver al cargo, en el que tomó licencia para asumir como ministro de Seguridad bonaerense.
Entre los que mantuvieron su lugar está Gabriel Katopodis (FpV), que asumirá por un segundo período en San Martín. El dirigente fue parte del pelotón de intendentes que se sumó al massismo para regresar sobre la hora al Frente para la Victoria.
UNA retuvo San Fernando, donde el massista Luis Andreotti consiguió su reelección. En Tigre, tierra del líder del Frente Renovador, triunfó el intendente Sergio Zamora.
Tras una campaña marcada por hechos de patoterismo, el intendente de Malvinas Argentinas –que se presentó buscando la quinta reelección–, perdía el sillón del municipio frente a Leonardo Nardini (FpV), titular del Anses local. La diferencia era de menos dos puntos, 44,24 a 42,31 por ciento, pero con el 94 por ciento de las mesas escrutadas.