Médica argentina fue a capacitarse a Italia y ahora no puede volver
«Mi nombre es Locarnini Maria Florencia, y esta es mi situación. Soy médica egresada de la UBA. Residente de 4° año de Pediatría de la Clínica San Jorge, Ushuaia. Desde el 30 de diciembre del 2019 me encuentro en Roma. Vine a esta ciudad con el fin de realizar mi periodo de formación en terapia intensiva en el Hospital Pediátrico Bambino Gesu, mucho antes de que se detectara el primer caso de Covid-19 en el país» nos comenta la profesional varada en Italia.
Florencia, le describe a su pueblo, este momento en el que espera con ansias se concrete su regreso próximo a la Argentina «Hoy 27 de marzo del 2020, me encuentro aun en Roma, Italia. Estoy viviendo la desesperante situación de encontrarme atrapada en el epicentro de una pandemia, lejos de mi familia y amigos, sin la seguridad de saber cuándo regresare a mi país y desconocer la verdadera evolución de esta enfermedad. No solo desde el punto de vista científico sino también desde las múltiples problemáticas socioeconómicas que afrontaremos como país y mundialmente.
Con la angustia de saber que no puedo ser de ayuda en este momento por no pertenecer al sistema de salud europeo y con la mayor preocupación de que esta pandemia se instaure fuertemente en mi país y no poder estar ahí para asistir y desarrollar mi labor para la cual me llevo preparando tantos años. Sintiendo que en cierto modo estoy abandonando a mis colegas y pacientes.
La médica, además nos comentó: «Desde entonces he presenciado tanto desde el punto de vista de un ciudadano, como el de un personal de la salud, como se minimizo la gravísima situación que se estaba viviendo en el norte del país. Y como poco a poco se fueron suspendiendo las actividades de la ciudad hasta que finalmente para sorpresa de todo el mundo Roma como toda Italia se declara en zona roja de riesgo epidemiológico y se instaura la cuarentena. Momento en cual también se comienza a sentir el miedo en toda la ciudad y las medidas sanitarias tomadas ya eran insuficientes. Decido entonces regresar a Argentina, sabiendo que esto era solo el comienzo y pronto los demás países tomarían las mismas medidas de seguridad.
Al inicio resultaba imposible contactarse con las aerolíneas y empresas de turismo de modo telefónico, con lo cual me dirijo directamente al aeropuerto para adelantar mi vuelo. Recibiendo un mal trato por parte de la aerolínea privada del país extranjero, se me rechaza la posibilidad del cambio debido a que aún me faltaba un mes para regresar. Les explico en carácter de médica que una pandemia, no es una situación que fuese a mejorar rápidamente en las próximas semanas y que necesitaba regresar a mi país para poder reincorporarme a mi lugar de trabajo según las normativas del territorio argentino. No obstante continuaron diciéndome que solo se estaban realizando cambios de las personas que tenían pasaje dentro de las 72 hs»
El proceso de repatriación
Por lo sucedido, Florencia Locarnini, dice «Mi familia y amigos preocupados por la situación comienzan a hacerme llegar números de teléfono y contactos con la embajada y cancillería, con lo cual logro completar el formulario de repatriación. Sin respuesta dentro de las 24 hs siguientes, me dirijo personalmente a la embajada y se me explica amablemente que iban a tratar de hacer todo lo posible por regresarme a mi ciudad, no obstante había muchos argentinos varados con situaciones de riesgo, tanto por las condiciones médicas como sociales.
Entendí en ese momento que no era la prioridad y tendría que esperar. A las 48 hs sin respuesta y acrecentándose el miedo en la población en esta ciudad fantasma, me comunico nuevamente con el consulado el cual me responde que estaban superados por las circunstancias y que el número de argentinos varados en el mundo era más alto de lo que se creía»
La odisea de la galeno, continúa tal lo describe en su relato: «Nuevamente decido intentar cambiar mi vuelo por medio de la aerolínea y logro realizarlo para el día 22 de marzo haciendo trasbordo en San Pablo, Brasil. Con lo cual muy ilusionada me dirijo al aeropuerto ese día con las valijas listas, departamento entregado y el check-in realizado. Al momento que arribo al escritorio para despachar valijas el administrativo me pregunta mi nacionalidad. Le explico que era argentina y que debía hacer pasaje por Brasil para llegar a Buenos Aires. Después de algunas llamadas telefónicas sin saber que era lo que estaba sucediendo, se me explica que Brasil a partir del 23 de marzo, día en el cual arribaba mi aéreo, cerraba sus fronteras a los extranjeros, con lo cual ese día el vuelo AZ 674 despegó, pero sin mí. La aerolínea no me compenso la perdida, ya que no había forma de ingresar a Sudamérica, desconociéndose cuando se retomarían las actividades habituales.
Nuevamente desesperanzada, desbordada por el miedo y la angustia regreso al día siguiente a mi departamento. Lo único que me sostuvo en ese momento, fue saber que contaba con mi familia y amigos que estaban igual de preocupados que yo y que a la distancia nunca me habían abandonado y se seguían ocupando de que volviera a casa. Sin importar el resultados de todas esas acciones, comprendí cuan invaluable es el amor de tus seres queridos que logra supera cualquier frontera y pandemia»
La virtualidad que nos comunica
«Otro rol importante actualmente, es el que juegan en este momento las redes sociales y los medios de comunicación, los cuales tienen el poder de controlar a la población pero así también de unirnos a todos en un fin en común y es este el último medio que tenemos para continuar la lucha y así regresar mis colegas varados y yo a nuestras instituciones de salud. Para así ayudar a nuestra comunidad»
¿De su experiencia de haber vivido y trabajado en Tierra del Fuego, Ud opina que la pandemia puede ser más seria en nuestra provincia?
Ciertamente que esta pandemia puede ser más seria en Tierra del Fuego, la cual tiene características epidemiológicas que la vuelven particularmente más susceptible. Características climáticas, logísticas y socioculturales No obstante esas mismas características, son las que la hacen a Ushuaia, una ciudad que al limitarse drásticamente el ingreso de personas por puerto y aeropuerto
como me comentan mis colegas, se convierte prácticamente en una comunidad cerrada, y la separación geográfica con Rio Grande y Tolhuin, permite que se puedan tomar medidas en cada ciudad sanitarias más enérgicas.
En el contexto de la pandemia en las ciudades grandes y abiertas, la cadena de casos y sus contactos se pierde. Tierra del Fuego es ideal para estrategias de búsqueda activa de casos de coronavirus, en vez de una vigilancia pasiva hasta tener los casos graves.
En su opinión ¿Por qué en el norte de Italia la pandemia presenta tanta mortalidad y no asì en Alemania?
Los expertos en Italia lo aducen a una respuesta tardía del sistema de salud, a no haber detectado a tiempo los primeros casos leves o moderados de COVID-19.
Alemania implementó una estrategia muy agresiva con búsqueda activa de casos, hisopados en forma extensa e incluso a pacientes con cuadros leves. Incluso en Roma, en el hospital que trabajé, ya alertados de lo que pasaba en Lombardía se empezó a hisopar en forma masiva en los triage prehospitalarios.
Entiendo que en Argentina una limitante podría ser la falta de reactivos y el hecho de haber centralizado las muestras en el Malbrán. Pero una vez que cada provincia tenga un número adecuado de reactivos, tal vez Tierra del Fuego por sus características pueda actuar en forma rápida y evitar casos graves o fatales por coronavirus.
Finalmente como pediatra ¿qué podría contar sobre los síntomas de la infección por coronavirus?
Afortunadamente , la mayoría de los niños permanecen sin síntomas o bien con síntomas leves. Al momento actual por ejemplo acá en Roma no hay ningún niño internado en terapia intensiva con Covid19. Eso no quita que en algunos casos sobre todo en niños con enfermedades subyacentes, el cuadro pueda complicarse. Por eso la importancia de la consulta telefónica en forma precoz.