Macri, el rey de la fuga
Por Juan Alonso
Corría noviembre de 2018. Mauricio Macri había advertido que si se volvía loco podría “hacerle mucho daño a los argentinos”. Y así fue. La inflación de ese año fue del 47,6% y la economía sufrió una retracción del 7,5%. Se trataba de la pandemia antes de la pandemia. Macri tomó una deuda de 100 mil millones de dólares del FMI y sus amigos del sistema financiero fugaron más de 80 mil millones de dólares. En síntesis: Macri y sus secuaces se fugaron un préstamo entero del FMI. Nadie sabe qué demonios sucedió con el mayor empréstito que otorgó ese organismo internacional. No se inauguró ninguna escuela, no se adquirieron vacunas de nada, ni se preparó el sistema sanitario para la pandemia que estaba por venir y que sacudió y sigue poniendo en jaque al planeta entero.
Pero lo peor no fue el desastre social y económico que nos dejó a 45 millones de argentinos y argentinas.
Al mismo tiempo que empobrecía la Argentina para su propio beneficio, el clan Macri fugó casi 10 millones de dólares a guaridas fiscales, no pagó la deuda histórica con el Estado por el Correo por 300 millones de dólares, y encima evaporó a través de su compañía Socma America S.A, la friolera de al menos tres giros por 87.500 euros en concepto de “servicios financieros” al extinto banco austríaco, Meinl Bank, cerrado por lavado de dinero, cuyos principales accionistas afrontan procesos penales en Europa y EE UU.
Ayer el diputado Rodolfo Tailhade se presentó ante la fiscal Gabriela Boquín que investiga la deuda del Correo con una demanda por presunta quiebra fraudulenta y fuga de divisas, basada en las notas del autor de esta crónica. Tailhade pidió a la Cámara Comercial que intervenga en el hecho e investigue lo que calificó como supuestos “giros fraudulentos”.
“En efecto –sostuvo Tailhade en su demanda penal- , el periodista Juan Alonso publicó en su cuenta de twitter (@jotaalonso) el pasado 29 de octubre lo siguiente: “Causa Correo: la empresa Socma Americana del clan Macri le envió tres depósitos de 87.500 dólares al Meinl Bank de Austria justo cuando el ex presidente hizo estallar la economía con una retracción del 7,5%. O sea: no pagó la deuda del Correo y fugaron divisas. Fin.”
El mismo día, pocas horas después, el periodista insiste con la información: “Esto sucedió en noviembre de 2018, cuando el ex presidente Macri decía que podría volverse loco y dejó el país en ruinas con una deuda de más de 100 mil millones de dólares. Su familia se llevaba los dólares afuera.”
Dos días después, el 31 de octubre, Alonso vuelve con el tema y publica el siguiente tuit: “El clan Macri con Socma Americana envió en noviembre de 2018 (cuando la economía argentina cayó un 7,5%) y se volvió loco, tres giros de más de 80 mil dólares a un banco de Austria investigado por lavado en EE UU y Europa. Es decir que no pagó la deuda del Correo y vació Socma.”
Atento la importancia y gravedad de la información publicada, y con el propósito de recabar mayores datos al respecto, tomé contacto con el periodista Juan Alonso, quien ratificó todo lo expuesto en sus redes sociales. Asimismo, me hizo saber algunos detalles adicionales de la operatoria: fueron 3 giros por 87.500 euros cada uno (y no dólares como erróneamente consignó en los tuits), concretados los días 20, 21 y 28 de noviembre de 2018.
El remitente de esos giros es la firma SOCMA AMERICANA S.A. y el destinatario de las remesas el MEINL BANK, el banco austríaco que ha sido suficientemente señalado en estas actuaciones por parte de la Fiscalía como pieza fundamental en el despliegue de las maniobras fraudulentas ejecutadas por Correo Argentino S.A. en el marco de su concurso de acreedores.
Entiendo que estas salidas de dinero de SOCMA AMERICANA (controlante de Correo Argentino S.A.) hacia el MEINL BANK guardan directa relación con los hechos enunciados por la Sra. Fiscal en su dictamen nro. 623/2021, del mes de mayo de 2021, en el incidente de investigación, en donde requirió del juzgado la producción de medidas de prueba relacionadas con el informe pericial de fs. 2932/2961 del principal”, concluyó el diputado.
El escándalo por los manejos de Socma Americana y la causa por espionaje ilegal a los familiares de las víctimas del submarino San Juan y dos barcos pesqueros hundidos en el Atlántico Sur –donde Macri está imputado-, inquieta al ex presidente que ya no se muestra con su esposa, Juliana Awada, más preocupada en lanzar productos con su marca.
La construcción mediática y cognitiva de una familia feliz se deshace con la carencia de lenguaje de Macri, incapaz de pronunciar una sola frase con sentido real.
Golf y soledad
Apenas salió de su marcha patética por Dolores sin declarar ante el juez Martín Bava y acompañado por un intendente balbuceante y su defensor Pablo Lanusse, quien anhela escribir como Leopoldo Lugones, pero habla como Boris Karloff en sus días funestos, Macri se mostró en las redes sociales golpeando una pelota de golf. No muy lejos de él estaba su secretario privadísimo, Darío Nieto –candidato a legislador por la Ciudad Autónoma por Juntos-, pero lejos de Awada, alias “la hechicera”.
Parecería que a la ex primera dama no le importa nada el presente de su marido acusado de múltiples delitos. Musitó un tibio apoyo en sus redes sociales hace más de una semana tras la primera indagatoria fallida ante el juez y está ocupadísima en el lanzamiento de sus sandalias de moda. Algunos portales deslizaron en estas horas, que “estarían viviendo en casas separadas”.
Quizá por eso, Macri aparece desencajo. Arrancó el micrófono de un cronista del canal C5N y luego pidió disculpas. Dijo que fue “un acto reflejo” y finalizó el mensaje subrayando, “lamento que haya terminado en el agua”.
Toda una afrenta para las familias de los 44 tripulantes del submarino San Juan, que esperaban saber por qué la AFI macrista los espió con sus bases de Mar del Plata y el AMBA en 2017 y 2018.
Por atacar al periodista Nicolás Munafó de C5N, recibió el repudio del gremio de prensa y de las cámaras patronales de la prensa comercial. Todo mal.
Como decía Goya: “El sueño de la razón produce monstruos”.