La verdadera razón del enojo de Lía Salgado
La mediática Lía Salgado había sorprendido con fuertes declaraciones en las que acusaba al kirchnerismo de graves delitos de corrupción, y a la mismísima presidenta de «tomar (droga) de la buena». En esta nota, el verdadero motivo de su enojo.
La ex conductora Lía Salgado reapareció en la televisión a partir de sus graves acusaciones contra el gobierno saliente: «No aceptaron que perdieron porque son corruptos, porque estuvieron robando sin parar durante doce años», dijo, aunque no profundizó sobre ello.
Quizás el hecho de que Daniel Scioli haya reconocido la derrota -y felicitado al presidente electo- aún sin haberse realizado el recuento final y con menos de dos puntos de diferencia, no haya sido un gesto suficiente para ella.
Además de expresar su deseo de que la ex mandataria «termine donde tiene que terminar: presa» y denunciar que fue censurada durante los 12 años de gobierno, Salgado insinuó una polémica teoría respecto a la muerte del fiscal Nisman: «Tenía miedo que me manden esos suicidadores que andan dando vuelta por Argentina, me mandan un auto y me atropellan», sostuvo.
La ex conductora felicitó al hombre del sur y le sugirió emprender juntos un nuevo negocio: una agencia publicitaria que maneje la pauta oficial
Resulta extraño que las pruebas de sus acusaciones sean «mails anónimos amenazantes» -los mismos que reciben cientos y cientos de figuras públicas, sin darles mayor trascendencia- y esboce una hipótesis sobre Nisman sin aportar ningun sustento jurídico.
Por último, Salgado aseguró que durante la administración kirchnerista hubo «más muertos que los de la dictadura militar». A pesar de sus diferencias ideológicas con Néstor y Cristina Fernández de Kirchner, resultó alarmante para el conjunto de la sociedad que la mujer compare un gobierno democrático -y con una gestión particularmente importante en materia de Derechos Humanos- con uno de los períodos más sangrientos de la historia argentina, que dejó un saldo de 30 mil detenidos-desaparecidos y más de 400 bebés robados.
No obstante, la reaparición pública de la «talk-show woman» produjo que trascendieran algunos hechos sorprendentes sobre la mujer.
Según se supo, el distanciamiento con los Kirchner había empezado en la década del ’90, cuando la mujer se casó con Adrián Gomez, responsable de prensa del ex ministro Domingo Cavallo durante la presidencia de Carlos Saúl Menem.
Según fuentes allegadas al ex presidente, Néstor Kirchner la miró desconcertado y le pidió que se retire inmediatamente
Con la llegada de Kirchner al gobierno, Lía Salgado se acercó nuevamente al entonces presidente para hacerle una polémica propuesta.
La ex conductora felicitó al hombre del sur y le sugirió emprender juntos un nuevo negocio: una agencia publicitaria que maneje la pauta oficial. Hábil en este rubro por el oficio de su entonces marido, Salgado vio en Néstor Kirchner la oportunidad de beneficiarse económicamente a costa del poder político, como ya había hecho su familia en la década anterior.
Según fuentes allegadas al ex presidente, Néstor Kirchner la miró desconcertado y le pidió que se retire inmediatamente. Desde entonces, ni él ni su esposa, Cristina Fernández de Kirchner, volvieron a recibirla.
Salgado temió que su particular propuesta saliera a la luz y encontró el momento de su venganza recién con la llegada de Mauricio Macri a la presidencia. Con la protección del nuevo jefe de Estado, la periodista arremetió contra aquellos que le negaron la posibilidad de enriquecerse de manera irregular. Quizás espera que el nuevo gobierno le tienda la mano y pueda concretar su fallido negocio.