La peor masacre con un tirador en la historia de Estados Unidos
Una balacera se desató en el interior de un local nocturno en Orlando, Florida, el domingo en la madrugada, causando medio centenar de víctimas. El tiroteo, que está siendo investigado como posible ‘acto terrorista doméstico’, es el más grave en la historia de Estados Unidos.
La milicia extremista Estado Islámico (EI) la autoría de la matanza en un boliche gay de Orlando que mató a 50 personas, según un comunicado difundido por la agencia de noticias Amaq, vinculada a los yihadistas y reproducido por la página web especializada SITE.
Pese a que no se trata de un comunicado directo del EI, la agencia Amaq tiene vínculos comprobados con la milicia y suele adelantarse a los anuncios formales del grupo extremista.
Poco antes de conocerse el mensaje en Amaq, el FBI había informado a la prensa que el atacante, identificado por los medios estadounidenses como Omar Mateen, había llamado por teléfono al 911 antes de iniciar el tiroteo.
Durante la llamada, Mateen juró lealtad «al líder del Estado Islámico», mencionó a los dos jóvenes que pusieron una bomba en la recta final del maratón de Boston en 2013 y al primer miliciano estadounidense que se inmoló en Siria, Moner Mohammad Abusalha, un ciudadano oriundo de Florida.
Además, el agente especial del FBI, Ron Hopper, dijo a la prensa que Mateen había sido objeto de dos investigaciones por parte de esa agencia de seguridad federal entre 2013 y 2014, informó la agencia de noticias EFE.
Según Hopper, el atacante fue investigado en 2013 por comentarios que hizo a favor del EI en las redes sociales, y en 2014 por la presunción de que quería cometer un ataque suicida, una sospecha que el FBI concluyó que se basaba en información «no concluyente».
Su padre, Mir Seddique, aseguró que este ataque «no tiene nada que ver con la religión» y contó a CBS que su hijo se había enojado al ver a dos hombres besarse hace sólo un par de meses en Miami.
«Estamos diciendo que pedimos perdón por el incidente. No éramos conscientes de nada de lo que él estaba haciendo. Estamos en estado de shock como el resto del país», dijo el hombre, cuyo hogar fue rápidamente allanado.
Mientras su padre no dudó en describir a su hijo como un hombre homofóbico, su ex esposa, quién habló con el diario The Washington Post bajo condición de anonimato, destacó que no era una «persona estable» y que la maltrataba.
«Me golpeaba. Venía a casa y empezaba a golpearme porque la ropa no estaba limpia o cosas así», afirmó la mujer, quien conoció al sospechoso hace ocho años en internet y decidió mudarse a Florida para casarse con él en marzo de 2009.
Al principio, «él parecía un ser humano normal» hasta que se tornó violento, agregó la mujer, quien además destacó que su marido no era muy religioso y hacía ejercicio en el gimnasio con frecuencia.
Además contó que su ex esposo no dio «nunca» señales de haberse radicalizado en un sentido religioso, poseía una pistola de bajo calibre y trabajaba como guardia en un centro de detención de menores.
“El era una personas muy introvertida», dijo la mujer.
Poco antes de conocerse el mensaje en Amaq, el FBI había informado a la prensa que el atacante, identificado por los medios estadounidenses como Omar Mateen, había llamado por teléfono al 911 antes de iniciar el tiroteo.
Casados en 2009 y divorciados formalmente en 2011, ambos se mudaron a Fort Pierce, en Florida, donde la familia de Mateen tenía un departamento. Cuando los maltratos comenzaron, los padres de ella intervinieron y la sacaron de la casa. «Ellos literalmente salvaron mi vida», contó al diario estadounidense.
Después de enterarse de la matanza en el boliche de Orlando, la mujer suspiró y dijo: «Todavía lo estoy procesando, definitivamente tengo mucha suerte».
Por su parte, el presidente Barack Obama vinculó el tiroteo con su frustrado intento de regular la venta de armas en Estados Unidos y sostuvo que lo que pasó «es otra prueba que nos recuerda lo fácil que es para una persona conseguir un arma y atacar en un cine, una escuela o un boliche. Tenemos que decidir qué tipo de país queremos ser».
El tirador, dijo, «era una persona llena de odio y en los próximos días descubriremos por qué y cómo sucedió esto».
El mandatario subrayó que se trata del «tiroteo más letal en la historia» de Estados Unidos, en una declaración efectuada tras reunirse con el director FBI y sus asesores en materia de seguridad nacional.
«Todavía estamos conociendo los hechos», apuntó Obama, al confirmar que el FBI investiga la masacre como «un acto de terrorismo».
El presidente ordenó también que las banderas queden a media asta en la Casa Blanca y todos los edificios federales hasta el anochecer del 16 de junio «como señal de respeto por las víctimas del acto de odio y terrorismo»
Donald Trump, en tanto, aprovechó la ocasión para criticar al presidente estadounidense: «Yo dije que esto iba a pasar y sólo se pondrá cada vez peor».
«En sus comentarios de hoy, el presidente Obama desgraciadamente se negó siquiera a decir las palabras ‘islam radical’. Sólo por esa razón debería renunciar. Si Hillary Clinton, después de este ataque, aún no puede decir estas dos palabras, debería abandonar la carrera hacia la presidencia», escribió el magnate en un comunicado.
Además, sostuvo que «si no nos ponemos duros e inteligentes realmente rápido, no vamos a tener nunca más un país. Porque nuestros líderes son débiles. Yo dije que esto iba a pasar y sólo se pondrá cada vez peor. Estoy tratando se salvar vidas y prevenir el próximo ataque terrorista. No nos podemos permitir seguir siendo políticamente correctos».
El Papa Francisco condenó el ataque a través de su portavoz, el padre Francisco Lombardi: «La terrible masacre que ha tenido lugar en Orlando, que ha causado numerosas víctimas inocentes, suscitó en el Papa Francisco y en cada uno de nosotros, sentimientos muy profundos de execración y condena, de dolor, de confusión frente a esta nueva manifestación de una locura homicida y de un odio sin sentido».
El portavoz vaticano deseó también que «las causas de esta violencia horrible y absurda, que altera profundamente el deseo de paz del pueblo estadounidense y de toda la humanidad, puedan (…) combatirse eficazmente y lo más rápido posible», añadió.
Mirá el video de la masacre: