“La mentira Detectar”: Cuestionamientos al test rápido de Larreta

“Te hisopan y en cuatro horas te dan el resultado”, señala Giordano en referencia al test Detectar que aplica el Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta. “Es una gran mentira. La gente va a unas salitas de barrio que dispone el GCBA y te realizan un test que a las pocas horas al 80 por ciento de las personas con síntomas les da negativo. Este test rápido se hace en las unidades febriles para alivianar la recarga que existe en el sistema, ya que la carga de vacunados y la de Covid positivos se realiza en el mismo sistema y los nosocomios no están autorizados a dar ningún informe en papel antes de cargarlo al sistema de salud”, explica, y agrega: “por eso un PCR en un hospital hoy tarda 3 días o más y para reducir la ansiedad de las personas con síntomas lo realizan en las unidades febriles obviando el único test que vale que es el PCR”.

Luciana aporta otros testimonios de personas que prefieren preservar su identidad, porque temen no ser atendidos en hospitales públicos o porque trabajan en el Gobierno de la Ciudad. “Hacete el rápido, el otro tarda un montón”, le aconsejaron a Federico G, albañil, que tenía fiebre, dolor corporal y de garganta. “Tenía Covid y el test rápido dio negativo; Federico contagió a su grupo de amigos en un asado, algunos de los cuales aún no estaban vacunados”.

“La jubilada de 80 años Sara R, luego de haber estado con su médico que era positivo, se hizo un test rápido que le dio negativo y a pesar de tener tres dosis de vacunas, dos Sinopharm y una AstraZeneca, se le diagnosticó Covid después de un PCR que le aconsejó su médico. Pero en ese interín ya había contagiado a parte de su familia”.

“Sebastian Q, al igual que su novia, contacto estrecho de familiares que también dieron negativos en los test rápidos, comenta que tuvo que pedir que le hicieran un PCR porque no se lo ofrecieron”.

Luciana Giordano –que contrajo Covid tras haber recibido las dos dosis de Sputnik V- le agradece por estar viva al doctor Roberto Hirsch, Jefe del Departamento de Enfermedades Infecciosas del Hospital Muñiz, “un profesional ignorado por el Gobierno nacional y por el de Larreta. Me salvó con su protocolo de ivermectina. Con 40 grados de fiebre, tos y una baja saturación me sugirió tomar el tratamiento experimental de ivermectina y en 24 horas respiraba normal y habían desaparecido la fiebre, los dolores, los vómitos y la diarrea”.

La experiencia de haber estado al borde la muerte y el hecho de conocer las vivencias de otras personas hacen que Luciana se plantee varios interrogantes. ¿Por qué no se dice que los casos están aumentando? ¿Por qué no separan los sistemas y cargan vacunados por un lado e infectados por otro? ¿Por qué no hay un protocolo estándar de tratamiento como en otros países y cada nosocomio aplica el criterio lo que le parece? ¿Por qué el PRO vende sus test rápidos como infalibles, generando una maquina de muerte y contagios? ¿Por qué en las unidades febriles se hacen test rápidos y no PCR como en la del Hospital Piñeiro y en el Álvarez? ¿Por qué el Hospital Álvarez no manda los resultados por mail y uno tiene que llamar cuatro días después de hacerse un PCR para que te digan el resultado verbal? ¿Por qué el Hospital Muñiz es el único que da el resultado en seis horas además de algunas clínicas privadas?

Tal vez demasiadas preguntas para un Jefe de Gobierno que se sabe impune y que no paga costos políticos por no dar respuestas. Pero nunca hay que dejar de plantearlas. Nada es para siempre, ni siquiera cuando un aparato político, mediático y judicial parece inconmovible.