«La cuestión está en ir a hablar a aquellos que no creen que esto haya sido posible»

Ignacio, el nieto recuperado por la titular de las Abuelas de Plaza de Mayo, Estela Carlotto, dijo en Rosario que tras la restitución de su identidad le tocó atravesar «una cuestión compleja pero llena de alegría» y relató cómo con esa alegría intenta «contagiar a algunos que por ahí andan con dudas».
“Siento que descansan sobre mis hombros un montón de responsabilidades que yo no pedí pero que tengo que aceptar, y entender que ahora soy de alguna manera un órgano difusor de la noticia de Abuelas y por eso estoy acá”, sostuvo el joven que se convirtió en el nieto número 114 en recuperar su identidad.
Montoya Carlotto brindó una charla en el teatro de la Asociación Empleados de Comercio de Rosario junto a Iván Fina, de la filial de Abuelas de esta ciudad, y los hijos de desaparecidos Matías Ayastuy y Sabrina Gullino, quienes buscan a sus hermanos apropiados por la última dictadura.
Además, Montoya Carlotto brindará éste sábado a las 21, en el mismo lugar, un recital con su septeto, integrado por músicos “amigos” de la localidad de Olavarría, contó.
Durante la charla, denominada “Notas de identidad”, el nieto de Estela, dijo: «En ese acto de pensar y repensar qué significa la identidad me tuve que enfrenar a un montón de decisiones”.
Siento que descansan sobre mis hombros un montón de responsabilidades que yo no pedí pero que tengo que aceptar, y entender que ahora soy de alguna manera un órgano difusor de la noticia de Abuelas.
Entre ellas, mencionó: «Entender mi nombre, entender mis nuevos apellidos, y la posibilidad que uno tiene de hacer los trámites desde cero, enfrentarse al papel en blanco de una partida de nacimiento que debe ser corregida”.
“Es una situación –explicó- que en mi caso me ha dado muchísimas enseñanzas, que me a permitido madurar y crecer un montón y no puedo parar de agradecerlo”.
En cuento a la charla, dijo que en ocasiones piensa “si vale la pena, porque todos ustedes saben de lo que estamos hablando”.
En esa línea, agregó que “la cuestión está en ir a hablar a aquellos que no creen que esto haya sido posible, porque hay un montón de gente que está pensando que esto es un curro, y lo han dicho”.
“Hay gente que le conviene sembrar la duda –continuó Ignacio-, decir esto pasó o no pasó, ¿para qué?, para que no les llegue a ellos la hora y los salpique la culpa de lo que han hecho, y por lo que ahora van a tener que responder”.
Montoya Carlotto consignó que brindar charlas “sirve para que todos tengamos los renovados bríos para seguir contando esta historia y entender que esta ya no es una historia que nos atañe solo a los nietos”.
Sirve además, dijo, “para que podamos tener la paz que necesitamos para terminar de una buena vez por todas y cerrar esta historia”.
Consideró que esa será “la única manera que nos va a permitir a todos como país cometer errores nuevos, pero no caer en los mismos errores de siempre”.





