Un indigente murió de frío en Paraná: Le reclaman un refugio al intendente
Carlos Getti encontró la muerte sentado en un banco de la plaza 1 de Mayo en Paraná. El miércoles por la noche, el frío le ganó a su cuerpo. Así lo encontró la policía cuando un transeúnte advirtió sobre la situación.
La víctima había llegado a Paraná desde el otro lado del río. Era oriundo de Santa Fe y hacía tres años que vivía y subsistía en la calle. Este invierno fue distinto. En Paraná, los refugios para personas en situación de calle permanecen cerrados.
Si bien el parte médico habla de broncoespasmo, quien escribió una carta abierta al intendente Sergio Varisco (PRO-Cambiemos) aseguró que el hombre murió de hipotermia. Más allá de las precisiones médicas, Carlos murió de frío. Poco más se sabe de la vida de este hombre, que estaba acompañado por otro vagabundo, quien -ebrio- no notó que él estaba muriendo. Un grupo de voluntarios lo había asistido con frazadas a la espera de la apertura de algún centro de contingencia. Pero no fue suficiente.
Paola Estebecorena es voluntaria en el Hospital San Martín y en una carta abierta le preguntó al intendente por el refugio para personas en situación de calle ubicado en la calle Enrique Carbo 945 que constaba de 70 camas y era obra de la anterior gestión.
Varisco aceptó reunirse con algunas organizaciones pero aseguró que los refugios están en etapa de mantenimiento y permanecerán cerrados pese a las bajas temperaturas. Se calcula que unas 60 personas viven en situación de calle en Paraná. Pero el intendente no pudo dar precisiones de apertura de los refugios y desde las ONGs remarcaron que “hoy por hoy no hay espacio para que duerman las personas en situación de calle en la ciudad de Paraná”.
El intendente aseguró que los refugios están en etapa de mantenimiento pero permanecerán cerrados pese a las bajas temperaturas.
“En los meses siguientes se agravará la situación por la cantidad de personas que no llegan a pagar el alquiler, más la comida, mas remedios, sobre todo los abuelos que cobran la mínima”, adelantó Paola quien aseguró “no bajar los brazos” hasta lograr que se habiliten los refugios.
Pese a la labor de los voluntarios que recolectan abrigo y comida para acercar a quienes duermen sin techo, desde el grupo de ONGs reconocieron que “la demanda aumenta, cada vez hay más y no puede ser que hagan los arreglos ahora casi en junio, por qué no lo hicieron en febrero”.
“Son personas, no números ni estadísticas”, remarca Paola, como si hiciese falta explicarlo. El cuerpo de Carlos ahora está en la morgue de Oro Verde. Mientras tanto, Paola y los voluntarios confían en la solidaridad de la gente.
Para donar alimentos y frazadas se puede contactar a Paola en su cuenta de Facebook. https://www.facebook.com/paolaalejandra.estebecorena?ref=ts&fref=ts
