Gustavo Melella, dirigente de FORJA: «Carta a la Militancia»
Tierra del Fuego y los intentos desestabilizadores
El Gobernador y dirigente de FORJA en Tierra del Fuego, compartió en las redes sociales, una Carta a sus militantes en la que insta a continuar con el trabajo focalizado en lo social y lo político atravesados por el contexto de la pandemia.
CARTA A LA MILITANCIA
Queridas y queridos militantes,
A todos nos está tocando vivir este terrible momento en la historia de la humanidad. Nadie está exento. Y nadie tampoco imaginaba tener que atravesar por esta situación que algunos definen como una guerra contra un enemigo invisible y hasta ahora imbatible. Pero que sin eufemismos es un enfrentamiento que nos pone cara a cara con la muerte.
En cada rincón del mundo, en nuestro país y en nuestra querida Tierra del Fuego estamos luchando para salvar vidas. Todos estamos en peligro: nuestra familia, amigos, vecinos, compañeros de trabajo, conocidos o no conocidos. Nadie está a salvo.
Tantas veces hemos mal utilizado la metáfora para definir una encrucijada diciendo que era una cuestión de vida o muerte. Hoy esa frase tiene el angustiante peso de la verdad.
Nosotros, que somos militantes de un espacio político que busca la justicia, la inclusión social y la solidaridad, sabemos de qué lado estamos: ¡del lado de la vida! Del único en el que podemos estar. Hoy Más que nunca.
Nuestro enemigo es esta pandemia, no nos podemos confundir. No es el vecino o la vecina que piensan distinto, no es la dirigencia ni la militancia de otro sector político. Frente a nosotros está el Coronavirus; vencerlo es nuestro objetivo, desde el lugar que nos toque ocupar. Esta pandemia no distingue a quien ataca!
No es este el momento de defender a ningún dirigente ni funcionario ni gobernante; ni mucho menos de atacar a quien hasta ayer era nuestro adversario político. Hoy todos Juntos, Unidos tenemos que luchar.
Hoy tenemos que ser mujeres y hombres de paz. Alguna vez lo dijo el Papa Pablo VI: si quieres la paz, defiende la vida.
Allí estamos de pie, cuidándonos a nosotros mismos y cuidando a quien tenemos al lado: al familiar, al amigo, al vecino, al semejante con el que jamás nos hemos cruzado, sabiendo que también nos cuida. Nuestra militancia hoy es difundir las prácticas sanitarias que nos mantendrán a salvo de esta pandemia.
Tenemos con qué: esa pasión, ese fuego, esa constancia y entrega que hemos demostrado en toda nuestra militancia son las mismas armas con las que hoy nos toca defender la vida.
Estoy convencido de que estaremos a la altura de las circunstancias. Estoy convencido de que saldremos airosos y orgullosos de esta dura prueba.
Esta lucha que hoy nos toca enfrentar será extensa y tiene varios frentes. La salud es el primero y el primordial. Pero también está el económico: perderemos puestos de trabajo, crecerá la pobreza y la desocupación, caerán todos los índices de consumo y producción.
Y así como no podemos permanecer indiferentes ante la pérdida de vidas humanas, tampoco podemos permitirnos la insensibilidad y el desinterés frente al dolor y la angustia del otro, del que le ha tocado perder todo. Seria de mucha irresponsabilidad de nuestra parte creer que podemos especular políticamente o tener algún interés electoral futuro usando esta lucha contra la pandemia. Esta situación no es joda, y debemos entenderlo!
Porque estoy convencido de que nuestra militancia nos verá salir orgullosos y airosos de esta crisis es que me animo a compartir este pedido. Pongamos nuestras energías, nuestro tiempo, nuestra entrega al servicio de los demás, de la vida contra la muerte, de la solidaridad. Juntos como dice nuestro querido Francisco y nuestro Presidente vamos a derrotar a esta pandemia. Nadie se salva solo.
Les vuelvo a pedir, militemos en cada uno de nuestros ámbitos, de nuestros espacios, de nuestras redes sociales por la solidaridad, por la paz y a favor de la vida.
Los abrazo con el alma a todos y a todas.
Gustavo Melella