
GRABOIS ADVIRTIÓ: LA REACTIVACIÓN DE LA CAUSA CONTRA MENGOLINI CONVIERTE EL CASO EN UN LEADING CASE INTERNACIONAL
Al referirse específicamente al accionar del juez Pablo Bertuzzi, Grabois fue categórico: “Son una serie de afirmaciones de un nivel intelectual de una babosa
Juan Grabois se refirió hoy a la reactivación de la causa judicial contra Julia Mengolini —impulsada por el presidente Javier Milei y reabierta por el juez Pablo Bertuzzi— en una entrevista en vivo en Futurock junto a la propia Mengolini. Grabois, además de dirigente y diputado nacional, es el abogado de la periodista en la causa.
En ese marco, Grabois sostuvo: “Se van sucediendo una serie de hechos que engrosan una carpeta que convierte el caso en un leading case internacional, donde no solamente tenemos la pata ejecutiva, sino la pata judicial. El elemento que no estaba era la validación judicial de un abordaje político sistemático de agresión contra un derecho de primera generación. Los del inicio de la modernidad.” Y agregó: “Tenemos un leading case que muestra claramente como la erosión de los derechos sociales requiere la destrucción de los principios políticos de primera generación, como la libertad de expresión, y que eso tiene una validación judicial.”
Al referirse específicamente al accionar del juez Pablo Bertuzzi, Grabois fue categórico: “Son una serie de afirmaciones de un nivel intelectual de una babosa, por parte de un juez que, más allá de mi caracterización del personaje que es mediocre repugnante, su pertenencia a la casta judicial pende de un hilo porque está mal puesto, por decirlo de alguna manera. Está puesto por decreto, está impugnado por la corte suprema de justicia. Su suerte depende exclusivamente del gobierno, entonces no puede hacer nada que el gobierno no quiera, por decirlo de una manera sencilla.”
Bertuzzi, el juez más roñoso del sistema judicial, puesto a dedo, sin legitimidad ni autoridad moral para ocupar el cargo, sobre cuyo nombramiento irregular la propia Corte Suprema de Justicia de la Nación ya se expidió, decidió revocar el sobreseimiento de la periodista Julia…
— Juan Grabois (@JuanGrabois) December 19, 2025
Y explicó el alcance institucional de esa situación: “¿Eso que muestra? Que efectivamente el gobierno no solamente ejerce violencia desde la institucionalidad política, sino también que la blinda desde la institucionalidad jurídica, por lo menos en un nivel intermedio como es la Cámara.”
En un análisis más amplio, el dirigente señaló: “Es importante que se pueda terminar de cerrar el concepto general de que hay una ofensiva en la Argentina, muy burda, contra los derechos de primera generación que son los derechos civiles y políticos. El derecho a la libertad de expresión o a la libertad de reunión o de asociación, que son elementos que horadan la democracia tal como la conocemos y que se van dando en un marco de facticidad. Es decir, no hay un cambio normativo.”
A su vez remarcó: “En Estados Unidos una cosa como esta sería un escándalo de proporciones inimaginables.”
El diputado nacional también expresó: “Acá tenemos los servicios de inteligencia fomentando el sembrado de fake news, el terrorismo psicológico que ejercieron contra Julia.” Y agregó: “Lo que pone de manifiesto es que el presidente utiliza el aparato del estado, – porque esto de que él lo hace a título personal no existe cuando uno es presidente-, utiliza el aparato del estado como una forma de acallar la libertad de expresión.”
Finalmente, Grabois interpretó la reacción del oficialismo en clave de la batalla cultural: “Es razonable lo que hizo Milei desde el punto de vista de la batalla cultural, de contraatacar, porque no está dentro de sus categorías conceptuales asumir que lo que están haciendo está mal. Ellos nunca van a asumir que lo que están haciendo está mal.” Y cerró: “El gobierno cada vez que pierde algo, no es que perdió una batalla. Pierde en su identidad de la cultural del winner, de la cultura de la prepotencia de hago lo que se me canta las pelotas total soy impune y gano. Y cuando pierde una batalla es un retroceso en lo que a ellos más les importa, que es la hegemonía cultural.”





