Cada Gobierno de derecha tiene su Martinez de Hoz
Las acciones del gobierno de Macri se vuelven cada vez más simbólicas como preocupantes. Después de impulsar ajustes, suba de precios y tarifazos, ahora Cambiemos designó al hijo del ex ministro de Economía de la última dictadura cívico-militar, Martínez de Hoz, como funcionario. Los Martínez de Hoz vuelven al gobierno gracias a la ayuda de Mauricio Macri.
El gobierno designó como funcionario a cargo de la vicepresidencia del Instituto Nacional de la Propiedad Industrial (INPI) a José Alfredo Martínez de Hoz, hijo del ministro de Economía durante el gobierno de la última dictadura cívico-militar de 1976.
Martinez de Hoz hijo, acompañará en la presidencia de la oficina de marcas y patentesa Dámaso Alejandro Pardo, ambos socios y representantes legales del estudio jurídico PAGBAM (Pérez Alati, Grondona, Benites Arntsen & Martinez de Hoz) que asesora a las principales empresas transnacionales en el país en asuntos jurídicos y propiedad intelectual.
Así lo informó el Observatorio Sudamericano de Patentes. José Martínez de Hoz es uno de los socios fundadores de PAGBAM y dirige el Departamento de Energía y Arbitraje del Estudio.
Desde el Observatorio, señalan que hay un conflicto de intereses en relación a Dámaso Pardo, ya que encabeza el área de Propiedad Intelectual de PAGBAM y es el agente de la propiedad industrial.
Dámaso Pardo y Martínez de Hoz, reemplazan a Mario Aramburu y Mario Díaz, respectivamente, quienes estuvieron por más de 10 años dirigiendo al INPI.
Cada gobierno de derecha no puede prescindir de tener cerca a su Martínez de Hoz. En la historia argentina, la familia descendientes de esclavistas y dueños de una de las mayores fortunas del país, ahora se relamen con la posibilidad que les brinda un gobierno de derecha como el de Cambiemos.
El origen de la riqueza familiar se remonta al origen de la Patria y aun antes, cuando el primer José Martínez de Hoz amasó un capital como traficante de esclavos y por ser “vecino importante” llegó a estar en el Cabildo Abierto de Buenos Aires el 22 de mayo de 1810, antesala de la Revolución de Mayo.
Las ganancias esclavistas se invirtieron en la compra de las primeras hectáreas al sur de Buenos Aires y ese fue un distintivo de su linaje, que un siglo después poseía 2,5 millones de hectáreas gracias a las dadivas del presidente Julio Argentino Roca por respaldar y proveer a la “conquista del desierto”.
Antes aun de volcar esos nuevos territorios a la cría de ganado para sus propios negocios de exportación de carnes, el patrimonio familiar de los Martínez de Hoz ya estaba diversificado a las finanzas y el apellido había alcanzado “brillo social”.
Fue el primer José Alfredo de la familia perteneciente a la oligarquía, nieto del esclavista y bisabuelo del fallecido, quien fundó en 1866 la organización más caracterizada de los “dueños de la tierra”, la Sociedad Rural Argentina, y poco después el Jockey Club y el Club del Progreso, que reunían al grupo más selecto de los “dueños del país”.
La familia que hizo negocios con esclavos, se adueñaron de tierras, apoyaron la campaña del desierto, y gracias a los gobiernos de derecha amasaron una de las fortunas más importantes de la Argentina y hasta dirigieron la Economía del país en la última dictadura cívico-militar, ahora entra por la ventana que Mauricio Macri les abre en su gobierno. Un clásico de la derecha argentina, tener a su Martínez de Hoz bien cerca.
Para tener mayores precisiones sobre la ideología familiar, en el último adiós al Ministro de Economía, el más reconocido de los Martínez de Hoz, quien supo ser la mano derecha de Videla en las cuestiones económicas del país, su hijo José, ahora designado funcionario por Macri, aseguró a viva voz que su padre afrontó “una persecución» y, aunque no lo nombró de manera explícita, se refirió así a la condena que pesaba sobre él desde el 2010, por la que cumplía prisión domiciliara, por el secuestro extorsivo, en dos oportunidades, del empresario Federico Gutheim y su hijo.
«Murió como vivió, con dignidad. Amó a su país y se jugó por él sin especulación», decía en ese momento al referirse a su padre, José Martínez de Hoz junior, el hoy vicepresidente del INPI gracias a la decisión de Macri de volver a abrir la puerta, para que por allí entren al gobierno, todos los fantasmas del pasado.
