Fadea desarrolla el primer avión que diseña y construye en 20 años
Se trata del IA-100, un avión de entrenamiento elemental que ha sido diseñado en la planta cordobesa con el aporte de ingenieros y técnicos de más de una decena de pymes.
El IA-100 es un avión de entrenamiento elemental con capacidades acrobáticas que, además, es el primero en Argentina que ha sido desarrollado con materiales compuestos (aquellos que se forman por la unión de dos materiales para conseguir la combinación de propiedades que no es posible obtener en los materiales originales).
Este proyecto le permitió a FAdeA realizar la capacitación intensiva de jóvenes profesionales y técnicos en la aplicación de múltiples disciplinas aeronáuticas como el dominio de capacidades de ingeniería, desarrollo, fabricación y ensayo de aeronaves en ciclos cortos de proyectos a medida; la fabricación de estructuras primarias en material compuesto, por primera vez sobre diseños propios; y la maduración de las técnicas de análisis fluidodinámico en túneles de viento y sistemas computacionales.
En el desarrollo de este proyecto participaron más de 90 ingenieros y técnicos de 11 PyMEs argentinas de base tecnológica asentadas en las provincias de Córdoba, Mendoza, Santa Fe, Buenos Aires y la Capital Federal.
El avión, proyectado en cuatro fases de desarrollo, proveerá la solución comercial a la demanda nacional de entrenamiento civil y militar.
La primera fase del proyecto es el demostrador tecnológico, cuyo prototipo está en plena fase de fabricación; un monomotor biplaza lado a lado y de ala baja, con capacidad de vuelo por instrumentos (IFR), electrónica digital y tren de aterrizaje fijo.
La segunda fase es el desarrollo de un entrenador civil con certificación FAR 23, utilitario con aviónica simplificada y tren de aterrizaje fijo, mientras que la tercera etapa está prevista cómo un entrenador militar con certificación FAR23 acrobático y tren de aterrizaje retráctil.
La cuarta fase consiste en el desarrollo de un avión de enlace civil y militar con certificación FAR 23 utilitario, cuatriplaza, con un motor de mayor potencia y ambas alternativas de aviónica y tren de aterrizaje.
El secretario de Ciencia, Tecnología y Producción para la Defensa, Santiago Rodríguez, destacó en diálogo con Télam que «con este proyecto FAdeA vuelve a diseñar y fabricar una aeronave después de más de 20 años, casi un centenar de ingenieros y técnicos de 11 PyMEs argentinas participaron del desarrollo de un innovador avión de uso dual”.
En el desarrollo de este proyecto participaron unos 90 ingenieros y técnicos de más de una decena de pymes argentinas de base tecnológica asentadas en las provincias de Córdoba, Mendoza, Santa Fe, Buenos Aires y la Capital Federal.
“El desafío de construir el primer avión argentino diseñado en materiales compuestos integra a casi una docena de empresas de base tecnológica nacionales que suman esfuerzos y capacidades en este hito de innovación tecnológica en la historia de la industria nacional”, apuntó.
El funcionario aseguró que “el proyecto presenta un futuro promisorio a las PyMES que participan de un avión pensado para cubrir las necesidades de entrenamiento elemental de los pilotos militares argentinos y que en sus subsiguientes fases de desarrollo puede atender las necesidades de renovación en gran parte de la flota de aeroclubes del país».
“Uno de los objetivos estratégicos que hemos puesto para FAdeA y para el Polo Industrial y Tecnológico es el de desarrollar la industria nacional, y en ese marco, ser autoridad de diseño es la única manera de maximizar el contenido nacional con una cadena de valor con pymes nacionales”, agregó Rodríguez.
El responsable del proyecto IA-100, Juan Vidal, es a sus 28 años de edad un ingeniero en mecánica aeronáutica egresado del Instituto Universitario Aeronáutico y a través del programa Bec.Ar completó un posgrado en Gestión de la Innovación en Ciencia y Tecnología en la Fundación Getulio Vargas de la ciudad brasileña de Río de Janeiro.
Vidal, que en 2009 ingresó en el área de diseño de estructuras de FAdeA, contó a Télam que «el programa IA-100 nace en diciembre de 2014 cómo una idea para incorporar un nuevo producto al mercado, un entrenador elemental que le permita a la fábrica ser una de las pocas en el mundo que puede ofrecer soluciones para todo el ciclo de instrucción de los pilotos».
«Una vez que se estableció el segmento en el que queríamos producir un avión lo que se hizo fue el estudio de mercado para ver que necesidades debería cubrir y cuáles son los requerimientos que debe cumplir para ello; todo eso conformó la zona de diseño en la que el IA-100 fue tomando forma», detalló.