
Escándalo: el macrismo le puso un hotel al arrepentido Vandenbroele para que se condene a Boudou
Una vez más, queda al descubierto la maniobra del macrismo para perseguir y condenar a ex funcionarios pertenecientes a la gestión kirchnerista. En las últimas horas se dio a conocer que el gobierno del ex presidente Mauricio Macri otorgó fondos millonarios para el armado de un hotel boutique a Alejandro Paul Vandenbroele, arrepentido clave para la persecución judicial de Amado Boudou.
El armado del negocio consta en el legajo de Vandenbroele como testigo protegido, al que accedió El Destape. Así las cosas, el programa de Protección de Testigos, que funcionaba bajo la órbita del ministro de Justicia Germán Garavano, fue utilizado para presionar, direccionar y premiar a arrepentidos que apuntar con el dedo a ex funcionarios K.

El director del programa, Francisco Lagos, designó a Carlos Linsalata, un policía porteño que migró al Ministerio de Justicia y específicamente al programa de Protección de Testigos para encargarse del seguimiento de los arrepentidos que interesaban al gobierno anterior. En diciembre de 2018, Linsalata fue reemplazado por Jorge Adamowicz. Además, en el legajo queda estipulada la participación de Gustavo Kollman, defensor oficial que fue parte de la operación Fotocopias de los Cuadernos Fénix.

El 24 de agosto de 2018 Linsalata envió una nota a sus superiores, que consta en la foja 515 del legajo al que accedió Ariel Lijadad, donde solicita $1.500.000 para un proyecto laboral para Vandenbroele. “Cabe destacar que el día 07 de Agosto pasado fueron condenados a prisión con cumplimiento efectivo por más de 5 años el Ex Vicepresidente de la República Argentina el Sr. Amado Boudou”, indica.

En tanto, en el folio 644 del legajo de Vandenbroele consta que el 9 de junio de 2019 el titular del programa de Protección de Testigos, Lagos, le entregó $300.000 a modo de “anticipo destinado a la instrumentación e implementación del proyecto de inversión (…) de un desarrollo turístico, identificado como una posada bajo el nombre ‘POSADA LA MASIA’”. En el legajo, además, consta un pago al dueño del inmueble por $60.000 con fecha del 28 de noviembre de 2018.
Según la documentación de su legajo, en agosto de 2019 Vandenbroele recibió $40.000 el 7 y otros $300.000 el 16. En el acta de esta última entrega consta que ya le habían dado un total de $600.000. El 9 de octubre le entregaron $200.000 más.

“Ubicada en una exclusiva zona de Chacras de Coria y rodeada de viñedos y bodegas, La Masía Hotel Boutique ofrece lugares únicos, especialmente diseñados para que sus huéspedes vivan una experiencia diferente”, describe la página web del hotel La Masía, emprendimiento que el arrepentido Vandenbroele gestiona en Mendoza gracias a fondos otorgados por la gestión de Cambiemos.
“En el caso de Boudou los jueces no tenían pruebas”
La abogada de Amado Boudou, Graciana Peñafort, se manifestó «consternada» ante una investigación periodística que indica que el testigo arrepentido del caso Ciccone, Alejandro Vandenbroele, recibió fondos públicos, a través del programa de Protección de Testigos, para incriminar al ex vicepresidente, hoy preso.
23. Esto que sabiamos todos, por los susurros de pasillos de tribunales siempre indiscretos y siempre sin pruebas , pero ciertos, Amado Boudou sigue preso.
Mientras que los jueces de Py como Bonadio buscan «salidas elegantes», Amado sigue preso arbitrariamente— Graciana Peñafort (@gracepenafort) February 3, 2020
«En el caso de Boudou los jueces no tenían pruebas: tenían el libro de (Hugo) Alconada Mon que no era prueba: no había más que eso», sostuvo Peñafort en diálogo con Radio El Destape sobre una investigación periodística realizada y publicada por ese medio en su portal web.
Recordó que quien «aportó una prueba, que no pudo acompañar con documentación, fue Vandenbroele, y en base a eso lo condenaron a Boudou».
«Sabíamos que había algo raro con Vandenbroele y ahora vemos que para la prisión de Boudou le pagaron con un hotel», sostuvo la abogada y cuestionó que «para el macrismo la libertad de alguien cuesta un millón y medio de pesos: es tremendo».





