Entrevistas IB24| Rebolloso: “Nuestros pueblos toman el agua de los ríos que están contaminando”

El integrante de la Asamblea por el Agua – San Rafael expresó: “Estamos en pie de guerra contra el fracking y vamos a jugarnos como lo hicimos frente a la explotación minera y metalífera, que contaminaba con cianuro y ácido sulfúrico”. Además, lamentó que “los medios locales no informan y sólo hablan a favor”.

Hugo Gulman

Los emprendedores cuentan con un brillante negocio para optar en caso de que no les atraiga dedicarse a la cerveza artesanal u otras ideas que algunos genios de la economía recomiendan: el fracking. Lo cierto es que, como nos pretenden inculcar desde el gobierno del presidente Macri, los negocios más rentables deben beneficiar a unos pocos en detrimento de la enorme mayoría del pueblo.

El fracking es una técnica para facilitar o ampliar la extracción de gas y petróleo del subsuelo a través de estimulación o fractura hidráulica. Para lograrlo, se utilizan diariamente varios millones de litros de agua que, según quienes se oponen a esta práctica, corren el altísimo riesgo de contaminar las napas de ríos y arroyos de donde se extrae.

Varios grupos se han organizado en distintas ciudades del país para evitar que el gran negocio hipoteque la salud de los habitantes de amplias regiones del país. Una de ellas es la Asamblea por el Agua – San Rafael. Rubén Rebolloso, uno de sus integrantes, expresa: “El pueblo mendocino despertó al oír la alarma frente a este sistema de explotación de petróleo en las cuencas y las nacientes de nuestros ríos. Es muy alto el riesgo que se corre, hay países que han prohibido el fracking y nosotros no lo vamos a permitir”.

Rebolloso cuenta que sobre las cuencas de los ríos Atuel y Salado, y sobre varios arroyos ya se han hecho perforaciones. Esas corrientes cruzan San Rafael, General Alvear, Villegas y llegan hasta La Pampa. Aunque los funcionarios de La Pampa aún no reaccionan, los vecinos sí: “El riesgo es la contaminación del Atuel. Los pueblos de la zona toman agua de ese río”.

-¿Con qué productos químicos contaminarían el agua?

Rebolloso: Se utilizan unos ciento veinte productos químicos contaminantes que llegan hasta 4000 metros. Al ser una zona altamente sísmica esos caños de cemento pueden fisurarse por los movimientos o que la natural corrosión los fisure y genere filtraciones, que irían directamente a las napas y a la cuenca de los ríos, contaminándolos.

Se calculan unos 17 millones de litros de agua por cada pozo, que ya no servirán para beber ni para riego pues estará infectada con químicos. Incluso están circulando videos que -advierte- “aunque muestran los ríos secos y responsabilizan al fracking, no reflejan la realidad y sólo pretenden confundir para desprestigiarnos”.

Desde la asamblea trabajan y se movilizan desde lo legal y lo político: “Vamos a jugarnos en la calle igual que hace doce años lo hicimos para impedir la explotación minera y metalífera, que operaban con cianuro, ácido sulfúrico y otros. Estamos en pie de guerra”.

Las dos grandes industrias más famosas de Mendoza, la vitivinicultura y el turismo, generan ingresos muy bajos si se los compara con la industria petrolera de la provincia: “Ahora crece el temor porque se han visto muchos camiones en la zona de Malargüe. Lo que hemos advertido ya es una realidad”, señala Rubén Rebolloso.

-¿Qué pasa con las autoridades provinciales?

Rebolloso: Tenemos mucha bronca porque Miriam Skalany, Directora de Protección Ambiental  de Mendoza, está a cargo de defender el medio ambiente en la provincia, pero sale a defender el fracking. Refuta a los técnicos calificados que plantean los riesgos y los medios le dan espacio a ella y nos lo niegan a nosotros.

-¿Cómo está reaccionando el pueblo?

Rebolloso: Los medios de comunicación no difunden el tema y los que hablan sólo lo hacen a favor. Por eso, cuando explicamos al pueblo el riesgo que corremos le llama la atención. Son cada vez más los que se interesan y otros no toman conciencia, pero tenemos una gran evolución con jóvenes que asumieron lo que ocurre y están trabajando. Ahora se ha producido una gran ola de difusión en las redes sociales.

-¿Hay temor en la gente?

Rebolloso: Un enorme temor. Muchos prefieren no oponerse públicamente por que esta es una comunidad muy pequeña y algunos son proveedores del estado o trabajan en el municipio. Resguardamos la identidad aunque somos miles. Las asambleas son horizontales y las decisiones se toman en conjunto. Esta la tenemos que ganar.