El tigre de Sergio Massa “se come un bife de motochorro”
El sitio Cadena BA accedió en forma exclusiva al guión de spot televisivo de campaña de Sergio Massa, donde la estrella es «un tigre», al cual durante la filmación denunció el subsecretario de Relaciones con la Comunidad provincial, Carlos Gianella, «fue maltratado».
En esta nueva y audaz propaganda política de Sergio Massa participan el felino en cuestión y también una menor y en líneas generales se trata de mostrar que la Argentina es un caos y Tigre un paraíso con una fuerte seguridad; pero lo que más impresiona es el explicito mensaje de «mano dura» para combatir el delito.
Durante una de la escenas, el «tigre» ingresa a un restaurant y pide un «bife de motochorro» o «de delincuente», en un claro mensaje «demagógico» de una política de seguridad en blanco y negro, extrema; con un mensaje de «exterminio», donde el metamensaje podría ser «si soy presidente impongo la pena de muerte» o «Yo, Massa o vivís en el caos, en el miedo».
La idea «creativa» pertenece a la agencia de Ramiro Agulla y tratando de despegarlo a Sergio Massa de la publicidad en cuestión han dejado trascender que el cliente era el Municipio de Tigre. Agulla fue el responsable de memorables campañas políticas como la de «Alica, Alicate» de De Narváez, o la de De la Rúa que afirmaba «Dicen que soy aburrido»… Sin dudas, Ramiro Agulla es un publicista «versátil».
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Suena «Staty Alive» de José Gonzáles.
Vemos escenas de jungla. Animales persiguiendo animales, violencia natural, stress de no ser cazado, etc.
Nos enfocamos en un tigre que observa todo eso contemplativamente.
No parece gustarle lo que ve.
De repente, levanta una pata.
Sorpresivamente, para un taxi. El tigre se sube atrás.
Vemos al taxi, con el tigre atrás, viajando por Panamericana y saliendo en Tigre.
El tigre baja. Camina por las calles. Mira las cámaras de seguridad. Vemos su imagen tomada por esas cámaras de seguridad en el centro COT. Hay tranquilidad. Observa el río. Viaja en lancha. Pasea por el puerto de frutos. Huele a algunos. Una familia le sonríe. Se mete en un restaurant. Vemos un primer plano del menú y su garra señalándole al mozo que quiere «bife de motochorro» o «de delincuente». Cuando corre el menú vemos sobre su mesa el aparato del botón de pánico. Se lo deja a una chica en la mesa de al lado.
Una hermosa imagen del tigre en lancha paseando con su melena al viento.
Cae la tarde y para otro taxi.
La puerta se abre y el tigre antes de subir, mira atrás hacia Tigre. Todo se ve tranquilo y hermoso.
Entonces cierra la puerta del taxi y lo deja ir. Se va a quedar un poco más. Quizás un tiempo más largo.
Sobreimprime:
Salí de la jungla.
Este verano vení a Tigre.
Parece un país distinto.
