El procurador boliviano reveló que no hubo auditoría de la OEA tras elecciones 2019
El procurador general del Estado de Bolivia, Wilfredo Chávez, señaló hoy que la Organización de Estados Americanos (OEA) entregó un análisis de integridad electoral y no una auditoría sobre los comicios de 2019, lo que representa un incumplimiento de un acuerdo y hace que sus conclusiones sobre el fraude que denunció no tengan valor.
La presunta auditoría electoral de la OEA fue el principal elemento que utilizaron los opositores del entonces Gobierno de Evo Morales para denunciar que había existido un fraude electoral y motorizar las masivas
protestas callejeras y los pedidos institucionales de renuncia que terminaron en el golpe de Estado y el exilio del mandatario derrocado.
“La OEA, primero, no ha hecho auditoría; segundo, no ha utilizado ningún parámetro de auditoría nacional. No ha hecho auditoría al cómputo, que era el objeto central, al que se había comprometido. En la segunda conclusión del informe dijo que se basó en el Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), en desmedro de las actas electorales, que se convierten en el documento de votos”, señaló Chávez.
En conferencia de prensa, el procurador desacreditó de esa manera las opiniones que se basaron en ese informe de la OEA para dar por hecho que se registraron irregularidades en las elecciones en las que el entonces presidente Morales buscaba otra reelección.
Chávez detalló que las conclusiones se dieron a conocer después de un informe de la Contraloría General del Estado que revisó el acuerdo entre la OEA y el Estado.
El procurador se quejó, además, de que la secretaría de la OEA “emitió un informe preliminar no previsto” y advirtió que el organismo había avisado que no podían terminar el informe hasta el martes 12 de noviembre pero “resulta que lo presentaron un día antes”.
“Tenía que presentarse al Gobierno y se lo expone en las redes”, dijo, según publicó el diario local Los Tiempos.
Finalmente, instó a quienes insisten con la existencia de fraude en esos comicios que pidan una revisión “acta por acta” para “cerrar de una vez el tema”.
Después de esas elecciones y el informe de la OEA se generaron protestas en las calles que derivaron en un golpe institucional contra Morales, obligado a renunciar por las Fuerzas Armadas y la Policía.