El mal momento del macrismo blue en el Vaticano
Luego de los escasos 22 minutos junto al Papa Francisco, Mauricio Macri fue derivado con su comitiva oficial a una reunión con el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Parolin, quien incomodó a los dos peronistas presentes.
Quienes conocen al Sumo Pontífice aseguran que el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Parolin, es el encargado de decirle a los invitados lo que el Papa prefiere callar.
Tal parece haber sido el caso en la reunión que mantuvo con la comitiva oficial que acompañó al presidente Mauricio Macri a Roma. Tras el encuentro de apenas 22 minutos que el jefe de Estado mantuvo con Francisco, lo derivaron inmediatamente con Parolín.
El cardenal no perdió el tiempo y les comentó a los presentes la delicada situación que se vive en el norte de Salta, donde el narcotráfico avanzó de manera alarmante y los delincuentes obran con total impunidad.
El antecedente de este reclamo se remite a la carta que el obispo de Orán, Gustavo Zanchetta, envió al Papa Francisco el jueves alertándolo de la situación y denunciando la complicidad -o al menos complacencia- del gobierno salteño.
Entre los que acompañaron a Macri estaba, precisamente, Juan Manuel Urtubey, quien viene escoltando al presidente en todos sus actos y recientemente declaró que «no le importa» ser el peronista más oficialista.
Al ser interpelado directamente, el mandatario de Salta aseguró -visiblemente nervioso- que se está ocupando del tema. Sin embargo, su respuesta no fue muy precisa: en la desesperación, citó la reciente intervención de la ciudad de Coronel Moldes, que en realidad se realizó por problemas financieros.
También padeció el viaje la gobernadora de Tierra del Fuego, Rosana Bertone, quien se alejó de las filas del FpV para encolumnarse detrás de Urtubey, acercándose notoriamente al gobierno nacional. La mujer, también parte de la comitiva oficial, no fue muy bien recibida en el Vaticano.
Parolín llegó a Roma en octubre de 2013 para reemplazar a Tarcisio Bertone, uno de los parientes de la gobernadora. ¿Quién era Tarcisio? El cardenal italiano que bregó para evitar que Jorge Bergoglio se convirtiera en el Papa Francisco, en aquel cónclave de hace tres años. La tensión entre ambos no pasó desapercibida.





